Advierten que el Estado Islámico incrementará atentados suicidas
Camión con explosivos dejó al menos 50 muertos; señalan que tensiones internas aumentan
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07 de marzo de 2016 a las 05:00
Al menos 50 personas murieron este domingo en un atentado realizado con un camión bomba en los alrededores de la ciudad de Hilla, al sur de Bagdad, que fue reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico (EI), en lo que fue el ataque más mortífero desde el inicio de este año en Irak.
El grupo terrorista, que proclamó un califato en las zonas bajo su control de Irak y Siria en junio de 2014, se había adjudicado la autoría de ataques recientes en territorio iraquí. EI conquistó varios territorios en Irak, pero desde mediados del año pasado ha estado a la defensiva. Desde que el grupo lanzó su campaña militar, la violencia en las ciudades había disminuido, ya que muchos de sus combatientes fueron desplegados en el califato.
Sin embargo, en las ciudades que siguen bajo control del grupo, las tensiones internas comienzan a aumentar y son evidentes los problemas de aprovisionamiento.
Según los expertos, los combatientes del EI van a recurrir cada vez más a este tipo de atentados suicidas a medida que el califato comience a perder terreno.
El pasado 1° de marzo, al menos 40 militares iraquíes murieron en un atentado contra una sede de las Fuerzas Armadas en la provincia de Al Anbar.
En los días previos, el EI perpetró también dos atentados suicidas, uno de ellos en la zona de Al Meqdadiya (noreste), que causó 35 muertos, y otro en el distrito bagdadí de Ciudad al Sadr, de mayoría chiita, con 55 fallecidos.
Entre las víctimas figuran 20 miembros de las fuerzas de seguridad. También hay 72 heridos. Radhi y varios oficiales de la policía han confirmado este balance, que convierte al ataque en el atentado más mortífero desde principios de año.
El camión estaba cargado de explosivos y estalló cuando los agentes de seguridad le dieron el alto, explicaron las fuentes.
En un comunicado publicado en las redes sociales, el EI afirmó que el atentado fue cometido por Abu Islam al Ansari. La organización dijo que el ataque estaba destinado a la población chiita, a la que el grupo considera como hereje.
Un año después, Boko Haram parece debilitado por la contraofensiva del Ejército nigeriano, que ha sumado victorias y liberado a cientos de rehenes. Las autoridades piden a los dos millones de desplazados que vuelvan.
Muchos expertos consideran esta alianza como una operación propagandística ventajosa para ambas organizaciones.
El analista Abdullahi Bawa Wase estimó que la alianza "fracasó al no atraer combatientes, ni armas ni dinero del EI, contrariamente a lo que muchos temían".
Según una fuente de seguridad nigeriana, el EI no es más "que una etiqueta de marketing que Boko Haram quiere utilizar para dar una imagen de grupo terrorista temible". De todos modos, los gobiernos de países occidentales siguen considerando a Boko Haram como una amenaza.
El grupo terrorista, que proclamó un califato en las zonas bajo su control de Irak y Siria en junio de 2014, se había adjudicado la autoría de ataques recientes en territorio iraquí. EI conquistó varios territorios en Irak, pero desde mediados del año pasado ha estado a la defensiva. Desde que el grupo lanzó su campaña militar, la violencia en las ciudades había disminuido, ya que muchos de sus combatientes fueron desplegados en el califato.
Sin embargo, en las ciudades que siguen bajo control del grupo, las tensiones internas comienzan a aumentar y son evidentes los problemas de aprovisionamiento.
Según los expertos, los combatientes del EI van a recurrir cada vez más a este tipo de atentados suicidas a medida que el califato comience a perder terreno.
El pasado 1° de marzo, al menos 40 militares iraquíes murieron en un atentado contra una sede de las Fuerzas Armadas en la provincia de Al Anbar.
En los días previos, el EI perpetró también dos atentados suicidas, uno de ellos en la zona de Al Meqdadiya (noreste), que causó 35 muertos, y otro en el distrito bagdadí de Ciudad al Sadr, de mayoría chiita, con 55 fallecidos.
Mortífero
El ataque de ayer fue cometido contra un retén en la entrada norte de Hilla, señaló el responsable de seguridad del Consejo provincial de Babilonia, Faleh al Radhi.Entre las víctimas figuran 20 miembros de las fuerzas de seguridad. También hay 72 heridos. Radhi y varios oficiales de la policía han confirmado este balance, que convierte al ataque en el atentado más mortífero desde principios de año.
El camión estaba cargado de explosivos y estalló cuando los agentes de seguridad le dieron el alto, explicaron las fuentes.
En un comunicado publicado en las redes sociales, el EI afirmó que el atentado fue cometido por Abu Islam al Ansari. La organización dijo que el ataque estaba destinado a la población chiita, a la que el grupo considera como hereje.
Supuesto marketing
La adhesión el año pasado del grupo islamista nigeriano Boko Haram a los yihadistas del EI hizo temer que la insurrección sangrienta en el norte de Nigeria adquiriera una dimensión internacional, pero nada de eso ha sucedido.Un año después, Boko Haram parece debilitado por la contraofensiva del Ejército nigeriano, que ha sumado victorias y liberado a cientos de rehenes. Las autoridades piden a los dos millones de desplazados que vuelvan.
Muchos expertos consideran esta alianza como una operación propagandística ventajosa para ambas organizaciones.
El analista Abdullahi Bawa Wase estimó que la alianza "fracasó al no atraer combatientes, ni armas ni dinero del EI, contrariamente a lo que muchos temían".
Según una fuente de seguridad nigeriana, el EI no es más "que una etiqueta de marketing que Boko Haram quiere utilizar para dar una imagen de grupo terrorista temible". De todos modos, los gobiernos de países occidentales siguen considerando a Boko Haram como una amenaza.
