Algunos Centros de Atención a la Infancia y la Familia (
CAIF)
se vieron obligados a bajar la frecuencia de la alimentación a niños menores de 4 años a causa de un atraso en la entrega de dinero por parte del Estado. La situación fue alertada por padres y administradores de CAIF a legisladores del Partido Nacional, y según dijo el miércoles a El Observador el diputado Amin Niffouri, 90% de los centros tienen atrasos en el cobro.
Ante esta situación, el Ministerio de Desarrollo Social (Mides) publicó en su cuenta de Twitter que a partir del 28 de julio (ayer) se harían efectivos los pagos a los centros.
El director de Primera Infancia del Instituto del Niño y el Adolescente del Uruguay (
INAU), Raúl Ferrando, quien el miércoles había dicho a El Observador que existían atrasos en los pagos –aunque no tantos como los que plantearon los legisladores-, señaló ayer que este jueves se trabajó en el tema y que, de acuerdo a información que se le brindó en el Instituto Nacional de
Alimentación (INDA), a partir de hoy se empezará a acreditar el dinero en las cuentas.
El convenio con el INDA permite abastecer a los centros para que alimenten a los niños. El instituto depende del Mides desde enero de este año. En los centros CAIF se atiende a 33 mil niños de familias de bajos recursos en todo el país.
Cada uno de los centros recibe $ 31 por niño por día para comprar comestibles. Para el resto de los gastos los centros reciben partidas que envía el INAU con las que se pagan los salarios de los trabajadores, alquileres, seguros, obligaciones con el Banco de Previsión Social y otros insumos.
Los centros que trabajan con educación inicial atienden a niños de 2 a 4 años, de lunes a viernes y en turnos de 4 a 8 horas. Cada niño recibe hasta 3 comidas diarias. Otra modalidad de trabajo se da con los niños de 0 a 2 años que asisten con un adulto y trabajan en talleres con psicomotricistas y educadores. También reciben desayuno o merienda.