Así es Sodimac, el gigante del hogar que se instala en Uruguay

Por primera vez en la historia de Uruguay se podrá, a partir de los últimos días de marzo, en una misma tienda comprar la cantidad suficiente de materiales como para construir una casa, todos los implementos para crear un jardín, el interior de una casa, una radio para el auto, muebles, artículos de decoración y un tupper para la vianda, por nombrar algunas cosas.

Esto es lo que a grosso modo formará parte de los 15 mil artículos que estarán a la venta en los 10 mil metros cuadrados que tendrá la primera tienda de la cadena chilena de proyectos para el hogar y construcción, Sodimac, que abrirá en Barra de Carrasco, en avenida Giannattasio, entre el Colegio Alemán y el Géant. Además, durante el último trimestre del año, una superficie igual estará en Sayago y la cadena ya planifica la apertura de dos tiendas más entre 2016 y 2017 en lugares a determinar, sin descartar el interior del país.

Con una inversión inicial de US$ 40 millones, al concluir 2015 se habrán creado aproximadamente 450 puestos de trabajo directos y una relevante cantidad de indirectos (instaladores y transportistas). Sodimac tiene 240 tiendas distribuidas en Argentina, Brasil, Colombia, Perú y por supuesto, Chile. En estas se vendió US$ 5.639 millones en 2014. La empresa es parte del grupo Falabella, cuyas ventas en sus 440 tiendas y 38 shoppings alcanzan los US$ 12.464 millones.

Las dos primeras tiendas a instalarse en Uruguay contarán con dos de los cinco rubros que abarca la cadena: Homecenter y Constructor. Es decir, equipamiento del hogar y decoración, y materiales de construcción. Los otros tres formatos son: empresas –atiende constructoras e industriales–, Homy –espacios para el hogar– e Imperial –una línea propia de maderas–. Realiza también ventas por internet, algo que en principio no estará disponible en Uruguay.

El recorrido
CyN tuvo la oportunidad de visitar una tienda Sodimac en Santiago de Chile, que se indicó desde la compañía que es similar a la que se abrirá en Uruguay. El tamaño del lugar sorprende y lleva a pensar que uno debe disponer de un buen rato para poder recorrer y hacer una compra inteligente. El recorrido por la tienda atiende las necesidades del hogar desde afuera hacia adentro. Comienza con el jardín, con vivero y productos relacionados, para luego adentrarse en lo más profundo de la casa; termina con la cañería. En el medio pasa por el equipamiento integral del baño, el living, los dormitorios y el garaje.

Todo lo que se vende está presentado en altura y disponible debajo, en una caja que uno toma y se lleva sin necesidad alguna de consultar. El paseo es guiado por cartelera informativa que asesora sobre los productos. De todos modos, desde la empresa se hace especial hincapié en la capacitación a los empleados y en que estos sean capaces de asesorar al cliente en lo que desee construir.

La discusión del “hágalo usted mismo” y “hágalo para mí” entra en juego dado que es posible comprar todo lo que uno se le ocurra construir adentro o fuera de la casa. Sobre esto, la postura de la empresa es que ellos venden las dos cosas, pero claramente hay una tendencia a incentivar la opción de que uno termine siendo su propio constructor. Lo incentivan con el asesoramiento y porque además se dictan talleres en la tienda para aprender distintas técnicas de construcción.

La sección de Sodimac Constructor es tal vez más novedosa para los uruguayos. Se deja de lado el carrito y se ingresa con camioneta o camión y se va haciendo el recorrido comenzando por los materiales para construir los cimientos y terminando con el techo. Una vez cargado el vehículo, se pasa por caja con el papel de los distintos artículos y se paga.

Los ejecutivos de la empresa confían que en Uruguay hay “cultura de casa”, hay muchos propietarios y hay una clase media pujante. Entienden además que hay muchísima gente a la que le gusta hacer ellos mismos el trabajo y que puede llegar a haber un corrimiento entre los que antes confiaban a otra persona estas tareas hacia la persona que hace todo por sí mismo.

Los miedos
Desde que llegó a Uruguay la noticia de que el gigante de proyectos para el hogar y la construcción se instalaría en Uruguay, algunos miedos se hicieron sentir en las ferreterías, barracas, pinturerías, locales de equipamiento y decoración. Temen que el impacto de una empresa tan grande, capaz de bajar los precios en base al volumen de venta, acabe con sus negocios.

“Se instala Sodimac y todas las ferreterías de 40 cuadras a la redonda desaparecen”, dijo a Café y Negocios un comerciante chileno que prefirió no ser identificado. Ante este planteo, los ejecutivos de la empresa matizaron con ímpetu esta postura.

Señalaron que a partir de la apertura lo que ocurre es que las tiendas más chicas se diferencian especializándose en lo que mejor hacen. “Hay muchos que se fortalecen en algo que a nosotros nos cuesta hacer que es la especialidad. Somos generalistas y ellos logran especializarse mucho mejor”, señaló el gerente corporativo de la empresa, Enrique Gundermann (ver página 15).

“Para los clientes no hay un impacto negativo. Para algunos operadores que están dispuestos a mejorar sus servicios, a igualar los servicios actuales, yo creo que no debería haber un impacto negativo, sino que al contrario, es positivo, porque tienes un mayor mercado y mejores oportunidades para mejorar tu servicio con una referencia que puede ser distinta a la anterior”, agregó el ejecutivo argumentando también que la instalación de la empresa en otros cuatro países además de Chile demostró exactamente eso.

Con el delantal puesto
Las tiendas de Sodimac han logrado meterse entre los mejores puestos de la encuesta Great Place to Work en distintas partes del continente. Un logro muy difícil en el sector minorista. Esto se hace claro al recorrer una de sus tiendas, y observar a los empleados y los altos mandos. Todos usan el mismo delantal, y todos hablan de la empresa con visible orgullo.

Por esto, los ejecutivos hacen hincapié en la misión y visión de la empresa, en la que no aparecen objetivos económicos sino frases como “mejorar la calidad de vida”, “ser la (empresa) más querida”, “inspirar y construir los sueños y proyectos”. El impacto de la instalación en Uruguay de Sodimac tal vez genere alguna incertidumbre; pero queda claro que –habiendo visto la magnitud de las tiendas en Chile–se va a hacer sentir en la forma que los uruguayos compran para sus hogares, y en la forma en la que trabajan los comercios minoristas relacionados.