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Astori encontró otra vez al MPP como aliado para la Rendición

Los astoristas pretenden que la Rendición de Cuentas sea aprobada en el Parlamento sin mayores modificaciones y para eso tienen en el MPP y su peso en el oficialismo como un aliado fundamental
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27 de julio de 2017 a las 05:00
Como en el Presupuesto votado en 2015 y la Rendición de Cuentas de 2016, en la nueva instancia presupuestal que está a consideración de la Cámara de Diputados el equipo económico liderado por Danilo Astori (Asamblea Uruguay) encontró hasta ahora en el Movimiento de Participación Popular (MPP) uno de los principales aliados durante el debate interno del Frente Amplio.

En el oficialismo todos coinciden en que la prioridad debe ser aumentar el presupuesto educativo ante el compromiso de llevar las partidas de la enseñanza al 6% del Producto Interno Bruto (PIB), pero los roces están en cómo financiar ese aumento.

Fuentes de la bancada del Frente Amplio dijeron a El Observador que hasta el momento los mujiquistas se pusieron del lado del astorismo en el camino de "no mover mucho los parámetros de lo que vino" del Poder Ejecutivo durante los debates por la Rendición de Cuentas. En tanto, los socialistas, con apoyo de los comunistas, el grupo Ir, el Partido por la Victoria del Pueblo y la Liga Federal, plantearon recortes a ministerios para reasignar rubros en la enseñanza, el Sistema de Cuidados y el Hospital de Clínicas.

"Hay que evitar incurrir en una confusión que puede ser muy peligrosa: crecer no es poder gastar", dijo Danilo Astori

"La postura política del MPP es una postura de responsabilidad. Es muy fácil ponerse de acuerdo en cuáles son las necesidades, lo difícil es cómo esas necesidades se priorizan sobre la base de suprimir otras políticas, y ahí está el problema", dijo a El Observador el diputado del MPP, Alejandro Sánchez, al ser consultado sobre las negociaciones en el Frente Amplio.

El MPP, la fuerza mayoritaria entre los legisladores oficialistas, propone conseguir $ 200 millones a partir de cobrar una tasa a los tragamonedas que hoy no están regulados pero rechaza tocar partidas ministeriales, en el entendido que ya fueron aplicados recortes en la Rendición de Cuentas del año anterior. "Lo que hay que hacer es usar la racionalidad. Agarrar una tijera, decir corto acá y mando esto para el otro lado porque desde el punto de vista de asistir el gasto público social es importante, está bien. Esa sensibilidad la tenemos todos. El problema es que yo no quiero dejar desfinanciada ninguna política. Esa es la discusión: de dónde puedo sacar sin que eso signifique cercenar el desarrollo de otra política", agregó Sánchez.

El Partido Socialista propuso una partida incremental de $ 1.000 millones para la educación, pero el diputado del MPP afirmó que "el Frente todavía no tiene un número".

Los socialistas plantearon que parte de ese dinero sea obtenido del "fondo de inasistencias" de la Administración Nacional de Educación Pública. Ese monto ronda los $ 200 millones y es inferior a lo que se suponía en primera instancia, dijeron fuentes del Partido Socialista.

"Hay que ser muy cuidadosos porque, como no podemos ampliar el gasto, la única posibilidad es la redistribución", dijo Sánchez

Durante el debate interno, los socialistas impulsan la aplicación de una cláusula gatillo que habilite un aumento del gasto destinado a la educación en caso de un eventual futuro crecimiento económico.
Eso fue rechazado por Astori en declaraciones realizadas el martes a Canal 4.

En tanto, en el MPP advierten que se debe ser "cuidadoso con la redacción". Sánchez dijo que los mujiquistas apoyan destinar más recursos a la enseñanza cuando haya un excedente entre los ingresos y egresos del Estado, pero no acompañan necesariamente regirse por el crecimiento del PIB.

Al cierre de esta edición todavía no había nada definido y, además, según dirigentes oficialistas consultados, todo dependerá de la negociación con la oposición.

Cruce por seguridad

Una de las alternativas –planteada por el Partido Socialista– era recortar la partida que el Ministerio del Interior tiene para pagar los sueldos de futuros guardias civiles. Eso generó un choque con el MPP, porque el mujiquismo advirtió que a la larga podía afectar la expansión del Programa de Alta Dedicación Operativa (PADO), una política que concentra policías en las zonas con mayores índices delictivos.

El Ministerio del Interior, que no tiene asignadas partidas incrementales en el marco de la Rendición de Cuentas, había resuelto reasignar partidas propias para poder así expandir el PADO, explicó el diputado Sánchez.

El MPP rechazó entonces la propuesta de los socialistas en el entendido que si se tocaba una parte del presupuesto de la cartera, luego se deberían modificar otras áreas y, en el camino, podía caer parte de lo reasignado a reforzar la política de seguridad. "Si tocas un programa, ese agujero lo tenes que llenar con otro. Y lo único nuevo que está haciendo el ministerio es aumentar en un 50% el funcionamiento del PADO. Entonces si vos le sacas de otras partidas, en vez de un 50%, será un 40%", explicó.

Sánchez aseguró que la negativa a no recortar el PADO no es porque el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, integre el MPP, sino porque consideran que esa política de seguridad es exitosa y va en la línea de cumplir la promesa electoral de reducir las rapiñas un 30% al finalizar el quinquenio.

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