El gobierno nigeriano estudia un video enviado por el grupo islamista
Boko Haram como "prueba de vida" de 15 de las 276 chicas que hace dos años fueron secuestradas en Chibok, un hecho del que sirvió para que el mundo advirtiera la existencia de este grupo terrorista islámico que opera en algunos países de
África.
El canal de televisión estadounidense CNN indicó que la grabación muestra a una quincena de muchachas recubiertas con un velo islámico negro. Dicen su nombre, aseguran que fueron secuestradas en Chibok y precisan la fecha de la filmación, el 25 de diciembre.
Las 15 adolescentes fueron identificadas por tres madres y una antigua compañera de clase.
La noche del 14 de abril de 2014 unos hombres armados de Boko Haram raptaron a un total de 276 chicas de la escuela femenina secundaria de Chibok. Cincuenta y siete de ellas lograron escapar poco después.
El video permite establecer que algunas de las jóvenes raptadas siguen con vida. La última grabación difundida sobre ellas era de mayo de 2014.
Un alto funcionario del gobierno nigeriano dijo a la AFP que había recibido el video, pero puntualizó que no se precipitará en anunciar conversaciones con el grupo yihadista.
Según explicó, los servicios de inteligencia ya recibieron unas imágenes similares en julio y, a pesar de las investigaciones, no se pudo dar con la identidad de los milicianos de Boko Haram que lo enviaron.
Eso sí, el gobierno recibió un pedido de rescate de US$ 1,1 millón por 10 de las chicas raptadas.
Las jóvenes podrían haber sido divididas en grupos y llevadas a lugares distintos, lo que complicaría las negociaciones para obtener su liberación.
Por su lado, el líder de Boko Haram, Abubakar Shekau, dijo en ocasiones anteriores que las niñas debían ser liberadas a cambio de combatientes islamistas presos en cárceles nigerianas.
Primeros objetivos
Ayer, en un nuevo aniversario de la desaparición de las chicas, algunos de sus parientes se reunieron para rezar ante la escuela de Chibok.
En otros puntos del país, en particular en la capital federal Abuya y en la capital económica Lagos, cientos de personas se manifestaron por la liberación de las jóvenes, convocadas por el movimiento #BringBackOurGirls.
Las muchachas de Chibok son las víctimas más conocidas de la insurrección de Boko Haram, que se sirve con frecuencia del secuestro como arma, en una guerra que ha dejado unos 20.000 muertos desde 2009.
Según las ONGs que militan a favor de los derechos humanos, miles de mujeres y niñas fueron secuestradas desde el inicio del conflicto.
Boko Haram las convierte en esclavas sexuales o en bombas humanas, mientras que los adolescentes y los hombres adultos son enrolados a la fuerza para combatir con los rebeldes que quieren instaurar un Estado islámico en el noreste de
Nigeria.
El director de Amnistía Internacional para Nigeria, M.K. Ibrahim, exigió la liberación de todos los rehenes y estimó que las jóvenes de Chibok se convirtieron en el símbolo "de todos los civiles que vieron destruidas sus vidas por Boko Haram".
"El gobierno de Muhammadu Buhari debe hacer lo posible a nivel legislativo para acabar con los sufrimientos de los parientes de estas jóvenes y de todos los rehenes en general, y garantizar una protección a la población del noreste y el acceso de todos los niños de la región a la educación", insistió.