La cadena estadounidense de comida rápida Burger King lanzó una arriesgada jugada de marketing esta semana en Estados Unidos, que por ahora parece estar generando más que nada confusión entre sus clientes.
En uno de sus locales, la empresa cambió su tradicional logo. Hasta modificó su nombre. Donde antes se leía Burger King, ahora aparece Fries King (“rey de las papas fritas”). La hamburguesa del logo dio paso a una porción de papas.
Esta acción se da en un momento en que la empresa busca promocionar sus nuevas Satisfries, las papas fritas que, aseguran, tienen 40% menos grasa y 30% menos calorías que las papas regulares.
En su fan page de Facebook, la compañía creó un álbum donde muestra varias fotos del local de Fries King. “De ahora en más, todo es sobre las papas fritas”, dice la empresa en el álbum. Los comentarios en él, si bien variados, son en su mayoría negativos ante esta movida.
Uno de los clientes aseguró que de esta manera se lograba “confundir” a aquellos que regularmente concurren a los locales. Otro sugirió que los asesores de marketing de la compañía estaban consumiendo crack.
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