Equipo negociador de la Policía registra récord de intervenciones

El último caso fue este miércoles 9 cuando los expertos en negociación del Ministerio del Interior intervinieron ante la ocupación que los trabajadores de la Dirección Nacional de Cultura mantenían en el edificio ubicado en la calle San José y Paraguay.

La llamada Unidad Táctica de Negociadores participó en otros 57 casos críticos desde su creación en 2014. La novedad es que la Policía cada vez enfrenta más episodios de crisis en los que es necesario recurrir a un experto en el oficio de negociar. De hecho, este año viene batiendo todos los récords en ese sentido. Por esa razón, el Ministerio del Interior tiene entre sus planes seguir apostando a la capacitación de más de sus policías en esa materia.

¿De qué se ocupa este cuerpo especializado de la Policía? En 2014, las autoridades del gobierno identificaron que debían apostar a la negociación en los casos más variados. Por eso, por resolución del ministro Eduardo Bonomi, fue creada esta repartición.

Su jefe, un experimentado policía que prefirió no revelar su identidad por lo delicado que es su trabajo, contó a El Observador que sus funciones van mucho más allá de la toma de rehenes.

Participan, por ejemplo, en cortes de ruta, huelgas de hambre, personas que se encadenan por algún reclamo, intentos de suicidios y atrincheramientos, entre otros. El equipo tiene cobertura en todo el país, pero el jerarca a cargo se negó a informar con cuánto personal cuenta por razones de confidencialidad.

Estos especialistas en negociación fueron entrenados por el FBI norteamericano. Gracias a un contacto que realizó el Ministerio del Interior, expertos de Nueva York, San Francisco e Illinois estuvieron en Uruguay. Las primeras dos semanas se interiorizaron sobre la realidad local y, durante los siguientes 15 días, entrenaron al personal.

Los uruguayos debieron rendir exámenes ante los integrantes del FBI y sus conocimientos fueron avalados por esa emblemática repartición dedicada a la seguridad.

Hasta el día de hoy, los locales mantienen contacto con los expertos del FBI.

"Nosotros vamos a seguir entrenando más personal. Queremos seguir generando negociadores",

sostuvo el jerarca policial e informó que hay una impresionante demanda de los policías para acceder a los cursos.

"El objetivo es incorporar en las currículas de aprendizaje la materia mediación de primer contacto para que en un futuro toda la policía nacional cuente con esos conocimientos", dijo el jefe de la unidad táctica de negociadores. No manejó, sin embargo, ningún plazo para cumplr la meta.

El caso reciente más notorio en el que era imperioso contar con un buen negociador fue la rapiña con toma de rehén en un supermercado de Rivera y Luis Alberto de Herrera. Cuando llegó la policía, uno de los dos asaltantes agarró a una de las cajeras de escudo humano. Quien intervino en la negociación fue el comisario Álvaro García, un policía que había recibido un curso sobre rescate de rehenes tres años atrás. García decidió ofrecerle su propio vehículo a cambio de la mujer mientras el cabo Ricardo Guevara lograba escabullirse por detrás del delincuente para detenerlo.