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Calvo Sánchez ahora trabaja para la empresa que compró el negocio de Buquebus en España en 2007
El argentino Hernán Antonio Calvo Sánchez, representante de la empresa española Cosmo en el fallido remate de los aviones de Pluna de octubre de 2012, pasó del negocio de los aviones al de los barcos. Es que “el caballero de la derecha”, tal como lo llamó el rematador en la recordada subasta realizada en la Rural del Prado , actualmente se desempeña como gerente general de la compañía de cruceros Balearia, que hace viajes a esas islas desde Miami.
La particularidad se genera en que Balearia es la empresa que en 2007 adquirió la operativa de Buquebus en España. Y de hecho, en su momento, Calvo Sánchez estuvo al frente de los negocios de la naviera de Juan Carlos López Mena en ese país.
Baleaeria inauguró semanas atrás un crucero para 1.000 personas que se caracteriza por ser “extremadamente rápido”, según el periódico de Bahamas The Freeport News. En declaraciones que formuló a ese medio, Calvo Sánchez dijo: “Estamos muy comprometidos con la comunidad de Bahamas y queremos brindar un buen servicio para todos”.
Calvo Sánchez, que es amigo de Juan Patricio López, hijo de López Mena, declaró como indagado en Uruguay en septiembre de 2014, en el marco de la investigación por la presunta maniobra montada en torno al fallido remate de los aviones de Pluna.
Al declarar ante la jueza especializada en crimen organizado Adriana de los Santos y el fiscal Juan Gómez, Calvo Sánchez admitió haber enviado una serie de correos electrónicos que probarían que actuó en acuerdo con López Mena, dueño de Buquebus y BQB, lo que podría configurar una maniobra fraudulenta.
Varias comunicaciones entre Calvo Sánchez y el empresario español Antonio Álvarez Hernández, dueño de Cosmo, evidenciarían que esa empresa actuó en su nombre y siguiendo instrucciones de López Mena, según los correos electrónicos que divulgó el año pasado el diario El País.
De esas comunicaciones surge que Calvo Sánchez se presentó en la subasta de los aviones usandosu segundo nombre y su segundo apellido para evitar ser asociado a Buquebus, empresa para la que trabajó durante 20 años.
