Los cancilleres de los países fundadores del
Mercosur están reunidos este lunes en
Montevideo para definir las condiciones del traspaso de mando de la
presidencia protémpore del bloque, que hasta ahora estaba en manos de Uruguay.
En esta ocasión se analizará si se posterga o no el traspaso de mando de Uruguay a Venezuela, tal como lo solicitó el canciller brasileño, José Serra, durante su visita en Montevideo.
Serra manifestó además "preocupación" por la situación en Venezuela, cuya canciller, Delcy Rodríguez, acusó a Brasilia de fomentar una "conjura" para evitar que Maduro asuma el puesto.
Nin, a diferencia de Serra, no compareció ante la prensa, y en un escueto comunicado emitido dos días después del encuentro, reiteró su voluntad de traspasar el mando, aunque no se especificó si sería a Venezuela.
Paraguay, por su parte, no acepta el traspaso de la presidencia pro témpore del bloque regional a un Estado cuyo gobierno -alega- "está buscando el cierre de un poder del Estado a través del Supremo Tribunal de Justicia, el cierre de la Asamblea Nacional, que es la voz del pueblo", declaró su canciller, Eladio Loizaga la semana pasada.
Del lado argentino, en declaraciones reproducidas por el diario La Nación, el presidente Mauricio Macri dijo en Bruselas: "Nosotros vamos a presidir los meses que vienen por delante el Mercosur".
Macri le había dicho al diario español ABC que el gobierno venezolano de Maduro "ha violado todos los derechos humanos" y "llevado a la hambruna y al abandono a la población venezolana. Por eso necesitan un referéndum, necesitan ir a elecciones lo más rápido posible".