Carta Postal: apuesta sanducera a recuperar un clásico

Leoni es diseñadora textil y fundadora de Ave Estudio, una empresa sanducera que engloba tres áreas: un taller de diseño, Carta Postal y desarrollo exclusivo de productos. La primera es un taller abierto que no exige ningún requisito de estudios ni edad. Comenzó brindando técnicas de estampado y la propuesta se fue ampliando a textiles y objetos de decoración.
“No es un curso en el que te gradúas de algo, no apunta a eso. El objetivo principal es el proceso creativo. No importa tanto el producto o el resultado final sino cómo llegas al producto”, explicó a C&N Emprendedores la diseñadora. Puntualizó, además, que es un taller de oficio, a diferencia de otros similares.

De hecho, nunca se interesó por enseñar en una escuela de diseño, ya que hay muchas personas que se dedican a esto. A Leoni le motiva llegar a otro público, pretende que el diseño se abra y crezca. “De otra forma, queda siempre en las mismas personas”, dijo.
Pero la artista quiso ir por más. Tenía ganas de ilustrar, pero no quería hacer un taller de dibujo sino hacer algo aparte. Así surgió Carta Postal. Es un proyecto que funciona con una suscripción mensual. Todos los meses les llegan a los usuarios dos postales ilustradas a mano impresas en papel. Se envían por correo y llegan al hogar de cada suscriptor. Recibir el producto por seis meses cuesta $ 1.178 y el año entero $ 2.050. Hoy tiene clientes en varios departamentos de Uruguay y también en el exterior. Una persona le regaló el servicio a una amiga que vive en Alemania. A su vez, una italiana conoció los productos por Facebook y quiso suscribirse. Así que recibe su Carta Postal en Italia. También ha tenido clientas de Argentina.

A nivel técnico son ilustraciones hechas a mano y pintadas con acuarela y temperas. Sobre la base de un tema escogido se desarrolla una carta de color y un concepto de colección. Cada mes tienen un motivo diferente. Por ejemplo, en el mes de marzo fueron tarjetas inspiradas en el mar.

La artista busca reivindicar la escritura a mano, una actividad que implica tomarse el tiempo para hacerlo. “El tiempo es el nuevo lujo. Si se considera que ese tiempo lo dedicás a otra persona, vale un montón”, aseguró.

Carta Postal se aleja de la inmediatez de los métodos actuales. Pese a esto, Leoni subraya que no es volver a lo nostalgioso ni melancólico, es un clásico y, por tanto, atemporal. “Siempre vamos a tener la oferta de whatsapp, mail, mensajes de texto, pero después tenés esa opción que trasciende todas las modas”, remarcó.

La tercera rama de su empresa nació por casualidad. Todos los trabajos que se hacían en el taller se retrataban y subían a las redes sociales. Esto provocó que desde distintos puntos del país surgiera interés. La primera propuesta fueron unos manteles individuales para un ciclo de cenas que había en un restaurante en Montevideo. Luego, Manos del Uruguay la invitó a participar en la primera edición de Viva la Lana –plataforma para revalorar este material–. Se hizo una oveja que fue desde Paysandú hasta Montevideo en bus. A pesar de los temores, llegó perfecta. La misma marca le pidió hacer las vidrieras de Navidad en Punta Carretas y Montevideo Shopping. Todos estos pedidos llegaron sin que se hiciera promoción, con la ayuda de las redes sociales

Reconocimiento del público
Para Leoni, se trata de un trabajo sacrificado que requiere de mucha dedicación pero vale la pena por la respuesta de la gente: “Al comienzo tenía dudas de si iba a funcionar, pero después me di cuenta de que las personas me buscaron”.

Su objetivo es seguir creciendo y expandirse a otros países. “Hay gente haciendo cosas muy interesantes en el país, pero creo que el producto de las tarjetas es interesante y afuera hay un mercado muy grande”, concluyó. l