Comenzó la cosecha de soja que alcanzará un volumen récord

Un relevamiento hecho por El Observador detectó que las primeras cosechas de soja arrojaron rendimientos dispares, de 1.900 a 3.000 kilos por hectárea, dependiendo de la ubicación de la chacra. En un área oficialmente estimada en un récord de un millón de hectáreas, si el rinde promedio se situara en 2.500 kilos por hectárea, como esperan los expertos, se obtendrá una cosecha también récord de 2,5 millones de toneladas. Al precio que hoy tiene la oleaginosa (US$ 480/t) permitirá un ingreso al país de US$ 1.200 millones, próximo al que generan las exportaciones de carne vacuna.

Carlos Dalmás, gerente de producción de Agronegocios Del Plata (ADP), explicó que en el caso de esta empresa se maneja un área de 47 mil hectáreas de la oleaginosa.

En las primeras trillas en el noreste (Cerro Largo, Rivera y Tacuarembó) hubo rendimientos de 2.600 a 3.000 kilos; en Paysandú oscilan de 1.900 a 2.600; y en Soriano las chacras han dado entre 2.500 y 3.000 kilos.
Álvaro Capurro, gerente de producción de Kilafen, comentó que esta empresa maneja 15 mil hás. en chacras ubicadas el 50% en el centro y el resto en el litoral, y en las primeras 1.000 ha “se logró un promedio de 2.700 kilos por há.”.

Por suerte los resultados productivos “no están siendo tan malos, porque este año los costos han crecido mucho y se necesitan rendimientos altos, hay que sacar kilos sí o sí”, afirmó Dalmás.
Destacó que en soja de primera se necesitan de 1.800 a 2.000 kilos para cubrir el costo, dependiendo de lo que se pague por arrendamiento. Y en el caso de la soja de segunda se precisan de 1.400 a 1.700 kilos “para empatar”.

En relación a la calidad del grano recogido, Dalmás indicó que “lo primero que se cosechó mostró algún problema de chaucha y grano verde, porque al llover a fines de febrero muchas plantas rebrotaron, pero no es un problema grave de calidad”.

Capurro dijo que en el caso de las primeras cosechas observadas la calidad es “muy buena”.

“Dentro de lo esperado está bastante bien, pero se nota que la sequía de enero y febrero hizo efecto”, dijo Dalmás, y añadió que “en Uruguay la forma de hacer soja está permitiendo aumentar un poco los promedios de rendimiento, incluso en años no tan buenos climáticamente”.

Atentos a las heladas

Marcelo Ferreira, gerente de la Unidad de Semillas de Erro, advirtió sobre otro fenómeno que tiene en vilo a los agricultores: la llegada de las primeras heladas. Ayer recorrió chacras linderas a la ruta 14 donde en la madrugada del domingo hubo una helada de consideración, con temperaturas por debajo de cero grado que incidieron mucho en zonas bajas, próximas a cursos de agua. Precisó que: “Estamos evaluando la magnitud del daño” que afectó a sojas que están finalizando el ciclo.

Ferreira dijo, en relación a la cosecha, que “recién está comenzando” y que en la próxima semana se estará trabajando a pleno en todas las chacras, pero ya hubo rendimientos “de 2.800 a 3.000 kilos, dentro de lo esperado”.

Venta a futuro

El 65% de la cosecha de ADP se comercializó a futuro, lo cual hoy se aprecia como una buena decisión dado que el precio está descendiendo. “Logramos cerrar a buenos precios”, dijo Dalmás: se logró un promedio de US$ 500 por tonelada, en tanto el precio al inicio de esta semana en Chicago arrancó a US$ 480.

Kilafen comercializó el 100% de los kilos que se proyectó producir para cubrir el presupuesto a un precio que estuvo en el eje de los US$ 475 por tonelada, por lo tanto resta vender el excedente de kilos por há. que se obtendrán salvado ese presupuesto, tras lo cual se podrá confeccionar el precio final por el producto, explicó Capurro.

“Cuando el precio que hay de referencia hace que tu negocio sea bueno no hay que dudar, el mercado está tan volátil que cuando está la oportunidad capaz que se puede perder una suba, pero no se arriesga tanto”, reflexionó Dalmás.