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Cuadrillas israelíes tonifican el mercado
El mercado de ganado gordo estuvo tonificado con la llegada de las cuadrillas kosher, que comenzaron su actividad en varias plantas el lunes pasado. La oferta de animales es reducida y ahora es la industria exportadora la que lidera la demanda y ajusta hacia arriba los precios, como lo había hecho el abasto en las semanas anteriores.
Con este marco algunos productores con ganados de mejor terminación se muestran un poco más pretenciosos y regulan las ventas a la espera de mayores valores. El novillo se negocia en el eje de US$ 3,40 y se generalizan cada vez más los US$ 3,50 para los animales de punta. La vaca se mantiene en el entorno de los US$ 3 y las especiales entre US$ 3,15 y US$ 3,20. Se acortaron las entradas a planta.
La Asociación de Consignatarios de Ganado (ACG) subió seis centavos su referencia para el novillo gordo a US$ 3,38 el kilo a la carne y tres centavos el valor para las vacas hasta US$ 2,98 el kilo. Los corderos subieron tres centavos a US$ 3,63, el cordero pesado uno a US$ 3,65. Las referencias para ovejas cayeron seis centavos hasta US$ 2,97 mientras los valores para los borregos y capones se mantuvieron en US$ 3,57 y US$ 3,25 respectivamente.
Respecto al mercado de reposición, la demanda es selectiva con preferencia marcada por ganados en mejor estado. Operadores manifestaron la dificultad para juntar las puntas entre oferta y demanda.
La faena semanal no resistió por encima de las 40.000 reses, como lo venía haciendo en forma ininterrumpida desde la semana que culminó el 11 de abril. En la semana que terminó el 4 de julio la faena cayó 7,6% hasta las 37.011 cabezas y se ubicó 8% abajo en la comparación interanual. El 47,6% del total fueron novillos (17.634 animales) y el 50% vacas (18.490). Fue la menor faena de vacas desde el 4 de abril.
La faena de junio cayó a 173.525 vacunos, 12% menos que en el mismo mes de 2014 y la menor desde octubre. Fueron 83.070 novillos –13% menos en la comparación interanual– y 85.640 vacas, 12% menos.
La faena de ovinos subió fuerte respecto a la semana anterior, que tuvo una actividad muy baja. Se faenaron 6.989 ovinos, un 147% más que la semana previa, pero 61% menos en la comparación interanual. Se faenaron 2.958 corderos que concentraron el 42% del total. Mientras, la faena de ovejas subió en forma relevante hasta las 2.939 cabezas.
El mes pasado se faenaron 21.151 ovinos, 67% menos que un año atrás. Se faenaron 11.009 corderos y 7.353 ovejas, 70% y 61% menos en la comparación interanual.
En cuanto a los precios de INAC, en la semana cerrada al 4 de julio el índice para el kilo de novillo subió de US$ 3,431 a US$ 3,448, el mismo valor que alcanzó un año atrás. El kilo de vaca INAC pasó de US$ 2,994/kg a US$ 3,026, y se ubicó 1,3% por encima de la referencia de la misma semana de 2014. El índice INAC para el kilo de cordero aumentó desde US$ 3,708 por kilo a US$ 3,716, pero se mantiene 4,5% abajo en la comparación interanual.
El precio promedio de exportación de la carne tuvo una leve suba tras tres semanas seguidas en baja.
La tonelada de carne vacuna exportada subió de US$ 3.723 a US$ 3.859, con lo que el promedio de las últimas cuatro semanas móviles subió a US$ 3.596/ton y se posicionó 7,5% abajo en la comparación interanual. En carne ovina, el precio promedio de exportación pasó de US$ 3.650 a US$ 5.416 y el promedio de cuatro semanas trepó a US$ 4.495 –la mayor referencia desde comienzos de abril–. La variación anual fue de más de 8%.
