De como Stranger Things le robó toda la atención a los estrenos de Hollywood

Aunque los Oscar tradicionalmente se celebren a fines del invierno estadounidense, su verdadera estación es el otoño, aquella en la que los grandes estudios deciden finalmente lanzar las películas con más chances de encantar a la crítica e inmiscuirse en las listas de la Academia. Para la taquilla, en cambio, existe el verano del hemisferio boreal. "Este es el momento en el que el mundo anhela un éxito de taquilla que no solo traiga millones de dólares, sino que también tenga el impacto cultural para que la gente siga hablando de él", afirmó la periodista Emily Yahr, de The Washington Post.

Sin embargo, mientras que los años anteriores tuvieron filmes como Intensa-mente, Jurassic World y Guardianes de la galaxia, este verano boreal se acerca a su final sin haber logrado su propio título memorable en los cines. Empero, como proclamó Yahr, "aunque una película exitosa, inteligente y con suspenso no logró ser encontrada en las salas, sí hubo un blockbuster", solo que en una plataforma distinta: Netflix.

Como es usual, la compañía no presentó datos de rating, pero la revista Business Insider obtuvo cifras de la startup SymphonyAM, que elevan a 8.2 millones el número de espectadores de Stranger Things en sus primeros 16 días de streaming. Esa magnitud ubica a la serie en el tercer puesto de una lista dominada por Orange is the new black, una serie consolidada, y Fuller House, un revival esperado.

Con un sinfín de artículos que señalan "razones por las cuales no se puede dejar de ver Stranger Things" o que proclaman, una y otra vez, la "obsesión de Internet" con la serie, su impacto también se nutrió en las bajas expectativas que había en su lanzamiento, como señala Jen Chaney, de Vulture.

Una de las películas más recientes y esperadas de esta temporada, en cambio, fue Escuadrón Suicida, que logró llegar a una recaudación de US$ 481 millones, que superó con creces los US$175 millones de su presupuesto. Sin embargo, el filme ha sido vastamente criticado por su pobre desarrollo de trama y construcción de personajes, así como por su inadecuado trabajo de edición. Luego de su estreno, notas como "El drama secreto del Escuadrón suicida" comenzaron a surgir, resaltando cortes de edición diferentes, ansiedad en el set y una producción acelerada. El actor Jared Leto, tras su polémico acercamiento al rol de Guasón, incluso dijo que se sentía "engañado por la película".

Los discursos en torno a Cazafantasmas fueron más benevolentes, pero la película se vio constantemente acosada por las comparaciones con la franquicia anterior y por los boicots online que promovieron sus detractores. Las cifras tampoco ayudaron, con US$ 194 millones de recaudación versus US$144 millones de presupuesto, y parecería haberse descartado una secuela del reboot.

Buscando a Dory podría haberse perfilado como la excepción, con una exorbitante diferencia de cifras (US$ 900 millones de rédito contra US$ 200 millones de presupuesto) y críticas positivas. Sin embargo, el filme no logró el estatus memorable de otros grandes éxitos de Pixar. "Día de la Independencia: Contraataque ya ha sido olvidado. Lo mismo con Capitán América: Guerra civil", agregó Yahr.

Con una nostalgia nutrida de blockbusters legendarios de ciencia ficción y terror, Stranger Things se convirtió en la pieza audiovisual más comentada y aplaudida del verano, incluso llegando a una puntuación de 94% en la web de agregación de reseñas cinematográficas Rotten Tomatoes.

Según Daniel Fienberg, de Hollywood Reporter, la serie también logró revitalizar una temporada generalmente templada para la televisión: mientras que los éxitos de taquilla llegan al cine en verano, las series toman el relevo a partir de setiembre, cuando el calor terminó: "Canalizando de una forma experta al maestro de blockbusters Steven Spielberg y al genio de lecturas vacacionales Stephen King, no es sorpresa que Stranger Things se haya convertido en la serie perfecta para mirar con el aire acondicionado al máximo".