El caso Pluna enfrenta a las gestiones frentistas del MTOP

El ex jefe de gabinete del Ministerio de Transporte, Andrés Copelmayer, dijo que el actual titular de esa cartera, Víctor Rossi, "hace rato que sintoniza poco con el sentir frenteamplista, habla de la realidad mirándose el ombligo y perdió la humildad seregnista".

"Según su visión, todo lo bueno hecho por el Frente Amplio en el ministerio empieza y termina con su soberana presencia", dijo Copelmayer a El Observador.

El ex jerarca respondió de esta forma a declaraciones realizadas por Rossi en el programa En Perspectiva el 29 de diciembre en el que consideró que "los números indican" que la gestión de Matías Campiano al frente de Pluna fue la mejor de toda la historia de la compañía.

"Pregunte al aeropuerto cuáles son los movimientos, pregunte a la Dinacia cuáles fueron los movimientos de esa época. Todavía hoy no ha recompuesto el nivel de conectividad que tenía en ese momento", dijo Rossi.

Copelmayer respondió que, al parecer, para Rossi "el gobierno de Mujica y el resto de los equipos de gestión frenteamplista son de palo". Rossi fue ministro de Transporte durante la primera presidencia de Tabaré Vázquez y fue convocado para ocupar el mismo cargo en la segunda administración del oncólogo. En tanto, Copelmayer cumplió funciones como mano derecha del exministro de Transporte, Enrique Pintado, durante el gobierno de José Mujica.

"Rossi cree que advino semidios. Igual nos pasó con el mamarracho de la escollera Cufré que la justicia ordenó demoler. Le dedicó más tiempo a los reclamos del exministro (nacionalista, Juan Carlos) Raffo, desesperado por deslindar responsabilidades, que a la bancada de Senadores de Frente Amplio con quien acordó asistir a comisión y aún no cumplió", afirmó Copelmayer.

Acerca de las afirmaciones de Rossi sobre la buena gestión de Campiani, Copelmayer sostuvo que esa declaración "es casi tan procaz como afirmar que los Peirano fueron los mejores banqueros del país".

"Alcanza con leer el dictamen de la jueza (Adriana) De los Santos para verificar el accionar delictivo de los Campiani. Ese mismo 2011, año record en transporte de pasajeros incluyendo transbordos, maquillaron burdamente el balance. Si para el ministro Rossi, Campiani fue el Gardel de la aeronavegación comercial uruguaya, yo con menos oído que un primus, soy Le Pera", sostuvo.

A diferencia de Rossi, Copelmayer reivindica la decisión de cerrar Pluna. "También entiendo que, por la herencia maldita del desprolijo y desventajoso cierre de Varig y los cortes de los puentes internacionales en la frontera con Argentina, en su momento Tabaré (Vázquez) y Danilo (Astori) optasen por no cerrarla. Acordaron con los Campiani, aceptando que el Estado fuese garante de la compra de los aviones para mantener la conectividad. Durante nuestra gestión Pluna SA tenía que ir a concurso con o sin juicios en Brasil porque estaba absolutamente quebrada. La opción era cerrar o continuar con la eterna sangría de subsidios directos o indirectos sin retorno, que en los 75 años de vida de Pluna, en un cálculo avaro, le costó a los uruguayos más de US$ 1.300 millones, el equivalente a un presupuesto quinquenal generoso para el MTOP", afirmó el exjerarca.