El Frente prepara una "ofensiva informativa" contra la derecha

En el Frente Amplio advierten que del mismo modo que una ola conservadora se expande por la región, en Uruguay la "derecha" ha iniciado una ofensiva que tiene como aliados a los medios de comunicación y a la que se hace preciso enfrentar dando "un giro" y pasando al ataque en la defensa de la gestión del gobierno.

Es así que el Secretariado Ejecutivo de la coalición resolvió poner un ojo en los problemas de las fuerzas progresistas de latinoamérica, en tanto que, a nivel nacional, consideró pertinente iniciar una "ofensiva de tipo informativo" en la que se promocione los logros de la izquierda en el poder.

"Claramente también en Uruguay el accionar de la derecha no da tregua al gobierno nacional. Se cuestiona al Presidente de la República (su autoridad, su liderazgo, su relacionamiento con la fuerza política). Se cuestiona el Presupuesto, la seguridad, la educación. Y en este marco es importante analizar el papel que juegan los medios de comunicación", consideró el Secretariado Ejecutivo en el informe realizado el viernes 30 en la Mesa Política al que tuvo acceso El Observador.

En el escrito se destacó "el embate muy fuerte (de la oposición) con cuestionamientos a las empresas públicas y el rol que cumplieron estos diez años de gobiernos de izquierda".

"El Frente debe dar un giro a su accionar y salir en una ofensiva de tipo informativo sobre todos estos temas para promocionar cuáles son los objetivos políticos del Presupuesto Nacional, en defensa de las Empresas Públicas y dejando en evidencia cuál es el fondo de los planteos esgrimidos por la oposición", se señaló en el documento.

Llamativamente, el escrito que alerta sobre los intentos de desprestigio del gobierno por parte de la derecha, se elaboró tras la misma reunión en la que los propios sectores del Frente Amplio advirtieron acerca de la "situación crítica" por la que atraviesa el oficialismo y no precisamente por culpa de la oposición.

Ese día se plantearon como asuntos "preocupantes" lo sucedido en temas tales como el apoyo expreso del Secretariado Ejecutivo del FA a la pasada gestión de ANCAP –que es cuestionada desde el astorismo y la Liga Federal-, las renuncias de jerarcas de la educación pública y la gestión del canciller Rodolfo Nin Novoa.

Hoja de ruta.

Así como consideran que en Uruguay se practica una oposición malsana, en el FA también destacaron que "el accionar de la derecha tiene muchos aspectos similares en países de América Latina" donde existe "un cuestionamiento a la legitimidad de los gobiernos y a las figuras de los presidentes" y se utiliza, entre otras herramientas, "el tema de la corrupción para desacreditar a los gobiernos progresistas".

Es así que el FA entendió "pertinente" promover entre los partidos de izquierda de la región "instancias de de intercambio y encuentro para la elaboración de estrategias comunes a desplegar hacia adelante". Más precisamente, el caso fue trasladado para que sea tratado en la Comisión de Asuntos y Relaciones Internacionales del FA (CARIFA) y se elabore "una hoja de ruta".

El jueves 29 El Observador había informado acerca de la preocupación que causó en el Frente Amplio el buen desempeño electoral en Argentina del político conservador Mauricio Macri que amenaza con desplazar al kirchnerismo.

"Nos preocupa que las fuerzas progresistas estén perdiendo territorio y que el trabajo de la derecha conservadora esté teniendo resultados. Hay que tomar apuntes y generar escenarios en donde se conversen estas cosas. Dentro y fuera del Frente Amplio. Debemos tratar de sacar experiencia de las cosas que están sucediendo", dijo a El Observador el secretario general y senador del Partido socialista, Yerú Pardiñas.

Con ese objetivo, los socialistas decidieron organizar intercambios con otras fuerzas progresistas de latinoamérica para conocer de primera mano qué está sucediendo en la región y trasladar la experiencia del Frente Amplio, una fuerza de izquierda que permanece en pie casi medio siglo después de su fundación, y en el gobierno. Esta inquietud fue posteriormente asumida por el Secretariado Ejecutivo del Frente Amplio.

En referentes de la izquierda uruguaya tampoco les gustó el triunfo de la derecha en la capital de Colombia, las muestras de debilidad de Nicolás Maduro en Venezuela y el descendente apoyo de Dilma Rousseff en Brasil y de Michele Bachelet en Chile.