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El gobierno aceptó hacerse cargo de un tercio del dinero para los municipios
El Ejecutivo quería que toda la plata para alcaldías lo pusieran las comunas; finalmente fue atendido el reclamo de los intendentes
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31 de julio de 2015 a las 05:00
El denominado "tercer nivel de gobierno" generó ayer un cortocircuito en la relación entre el Poder Ejecutivo y los gobiernos departamentales que tuvo a las partes en una constante negociación a lo largo de casi todo el día. Finalmente hubo acuerdo tras el reclamo realizado, fundamentalmente, por los jerarcas comunales del Partido Nacional, para que el gobierno se hiciera parte del dinero para el funcionamiento de los municipios.
La administración de Tabaré Vázquez flexibilizó su posición para que pudiera haber "un mensaje único" del mandatario y los intendentes.
Sucede que el gobierno central frenteamplista quiere fortalecer a los municipios y alcaldías de todo el país –el sistema fue impulsado por la izquierda– pero pretendía que esa partida de mil millones de pesos a la que se llegará en el último año del quinquenio de gobierno saliera del 3,3% del Presupuesto Nacional que las comunas reciben, según marca la Constitución.
Los jefes comunales consideraron que esa decisión representaba una sangría para las ya menguadas arcas de los gobiernos municipales e hicieron saber su enojo en la reunión del Congreso de Intendentes y en los pasillos del palacio municipal montevideano.
Finalmente, el Poder Eejecutivo aceptó pagar un 30% del dinero para los municipios y el restante aporte será captado del crecimiento económico que muestren las comunas. Si ese crecimiento no ocurre, entonces el gobierno pondrá la plata.
En la propuesta presentada ayer por el Poder Ejecutivo al Congreso de Intendentes se establecen las partidas anuales para los municipios. Allí consta las siguientes formas de repartir el dinero en el quinquenio : $ 100 millones en 2015; $ 400 millones en 2016; $ 700 millones en 2017; $ 934 millones para el ejercicio 2018 y finalmente $1.000 millones en 2019.
El Ejecutivo informó que las partidas se ajustarán anualmente en base al Índice de Precios al Consumo y se dividirán de acuerdo con tres criterios.
El 10% del monto anual se reparte en forma proporcional entre los 112 municipios; un 75% se distribuye teniendo en cuenta indicadores como el número de habitantes, la superficie, las necesidades básicas insatisfechas y los "niveles de educación de la población", y el restante 15% se destina a proyectos y programas financiados por el Fondo de Incentivo a la Gestión de los Municipios, "sujetos al cumplimiento de metas".
Una vez conocida la propuesta, la bancada de intendentes del Partido Nacional se reunió para analizarla y para evaluar los pasos a seguir. También hubo contactos entre el novel presidente del Congreso de Intendentes, Sergio Botana (Cerro Largo), el intendente de Rivera, Marne Osorio (Partido Colorado), el intendente de Rocha, Anibal Pereyra (FA) y representantes del gobierno frenteamplista.
Sobre el comienzo de la noche, las partes llegaron a un acuerdo para que el Poder Ejecutivo fortalezca monetariamente a los municipios sin debilitar las arcas de las intendencias.
El Poder Ejecutivo destina a las 19 intendencias una partida de Rentas Generales de entre el 2,90% y el 3,33% del Presupuesto Nacional.
Luego de las elecciones departamentales del 10 de mayo, el vicepresidente de la República, Raúl Sendic, anunció que el gobierno encabezado por Tabaré Vázquez se disponía a "tener un trabajo de mucha cercanía para que una parte importante de los recursos que hoy se vierten a todos los departamentos, lleguen directamente a las alcaldías".
El vicepresidente aclaró que "el gobierno departamental mantiene su independencia y su economía" pero "insistió acerca de que "hay recursos que se van a volcar directamente a los gobiernos locales".
La administración de Tabaré Vázquez flexibilizó su posición para que pudiera haber "un mensaje único" del mandatario y los intendentes.
Sucede que el gobierno central frenteamplista quiere fortalecer a los municipios y alcaldías de todo el país –el sistema fue impulsado por la izquierda– pero pretendía que esa partida de mil millones de pesos a la que se llegará en el último año del quinquenio de gobierno saliera del 3,3% del Presupuesto Nacional que las comunas reciben, según marca la Constitución.
Los jefes comunales consideraron que esa decisión representaba una sangría para las ya menguadas arcas de los gobiernos municipales e hicieron saber su enojo en la reunión del Congreso de Intendentes y en los pasillos del palacio municipal montevideano.
Finalmente, el Poder Eejecutivo aceptó pagar un 30% del dinero para los municipios y el restante aporte será captado del crecimiento económico que muestren las comunas. Si ese crecimiento no ocurre, entonces el gobierno pondrá la plata.
En la propuesta presentada ayer por el Poder Ejecutivo al Congreso de Intendentes se establecen las partidas anuales para los municipios. Allí consta las siguientes formas de repartir el dinero en el quinquenio : $ 100 millones en 2015; $ 400 millones en 2016; $ 700 millones en 2017; $ 934 millones para el ejercicio 2018 y finalmente $1.000 millones en 2019.
El Ejecutivo informó que las partidas se ajustarán anualmente en base al Índice de Precios al Consumo y se dividirán de acuerdo con tres criterios.
El 10% del monto anual se reparte en forma proporcional entre los 112 municipios; un 75% se distribuye teniendo en cuenta indicadores como el número de habitantes, la superficie, las necesidades básicas insatisfechas y los "niveles de educación de la población", y el restante 15% se destina a proyectos y programas financiados por el Fondo de Incentivo a la Gestión de los Municipios, "sujetos al cumplimiento de metas".
Una vez conocida la propuesta, la bancada de intendentes del Partido Nacional se reunió para analizarla y para evaluar los pasos a seguir. También hubo contactos entre el novel presidente del Congreso de Intendentes, Sergio Botana (Cerro Largo), el intendente de Rivera, Marne Osorio (Partido Colorado), el intendente de Rocha, Anibal Pereyra (FA) y representantes del gobierno frenteamplista.
Sobre el comienzo de la noche, las partes llegaron a un acuerdo para que el Poder Ejecutivo fortalezca monetariamente a los municipios sin debilitar las arcas de las intendencias.
El Poder Ejecutivo destina a las 19 intendencias una partida de Rentas Generales de entre el 2,90% y el 3,33% del Presupuesto Nacional.
Luego de las elecciones departamentales del 10 de mayo, el vicepresidente de la República, Raúl Sendic, anunció que el gobierno encabezado por Tabaré Vázquez se disponía a "tener un trabajo de mucha cercanía para que una parte importante de los recursos que hoy se vierten a todos los departamentos, lleguen directamente a las alcaldías".
El vicepresidente aclaró que "el gobierno departamental mantiene su independencia y su economía" pero "insistió acerca de que "hay recursos que se van a volcar directamente a los gobiernos locales".
