La llegada de la aplicación Uber a Uruguay alborotó el avispero del sistema de transporte. A tal punto que el lunes el presidente Tabaré Vázquez creó una comisión oficial que la legalidad de la aplicación para teléfonos inteligentes de origen estadounidense que conecta a pasajeros con choferes privados y que, como en Montevideo, ha generado resistencia en taxistas de todo el mundo.
El abogado tributarista Carlos Loaiza y su colega experto en derecho civil Gonzalo Ramírez coincidieron en que es necesario establecer una regulación para sistemas como Uber, dado que la normativa vigente no contempla ese tipo de esquemas, pero no ven viable que se prohiba el funcionamiento de la aplicación ya que eso iría en contra de la libertad de empresa que prevé la Constitución.
"Este tipo de discusiones se van a repetir porque la tecnología va más rápido", dijo Loaiza. "Lo que debería suceder es que se disponga una regulación integral", agregó el abogado.
Ramírez, en tanto, afirmó que se debería promover un proyecto de ley con una regulación a nivel nacional para evitar que se generen disposiciones contradictorias entre los diferentes departamentos. "Tiene que haber una solución general para este tema", dijo.
Uno de los aspectos más polémicos de Uber refiere a la tributación del servicio, tomando en cuenta que la empresa no considera a los choferes como sus empleados. Entonces, Uber paga los impuestos por su facturación (que es el 25% del valor de cada viaje) pero el problema radica en si los conductores pagan o no los impuestos derivados de sus ingresos. El abogado tributarista Carlos Loaiza dijo que otro elemento no menor y que en otros países está en discusión es si los choferes de Uber son o no empleados, ya que por ejemplo la Justicia de San Francisco decidió que sí lo son.
En la ley de Presupuesto que ya aprobó la Cámara de Diputados y que actualmente se encuentra a estudio del Senado se prevé una norma que transforma en deudor solidario ante el Estado a las empresas que faciliten transporte terrestre de pasajeros sin tener la correspondiente habilitación para eso. Se pretende que Uber sea responsable si sus choferes no hacen ni pagan los tributos. En el Parlamento, el subsecretario de Economía, Pablo Ferreri, dijo que se busca "evitar la competencia desleal" para que "tributen aplicaciones tipo Uber o la de alquileres", en referencia a Airbnb.
Loaiza expresó que el fenómeno de Uber genera interrogantes y dificultades en todos los países en los que se ha instalado o prevé hacerlo. Es que se trata de un modelo de negocios no contemplado en la legislación. Entonces, se plantean dos preguntas clave: ¿Uber es una empresa de transporte? ¿Es la empleadora de los choferes? El experto indicó que esos aspectos deberían regularse. Por otro lado, Loaiza indicó que en otros países se está analizando la opción de cobrar una tasa de circulación a los vehículos particulares que se registren como conductores de la aplicación.
Loaiza dijo que la comisión oficial que designada por el presidente Tabaré Vázquez para analizar la situación de Uber debería plantear una regulación "integral" que abarque aspectos impositivos, de situación laboral de los choferes y también sobre control y permiso de los vehículos. "Asimilar a Uber con taxi o remise. Se debería actualizarse la regulación previendo estos servicios respetando la libertad de empresas asimilando en lo posible a los sistema de transporte tradicionales, cosa que no quiere decir que se tengan que regular como un taxi, porque no es exactamente un taxi", indicó el abogado.
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