El registro de un retorno musical

En mayo de 2013, Blur, una de las bandas más importantes de la música británica, debió tomar un descanso forzado. Con una participación en un festival de rock en Japón sorpresivamente cancelado, la agrupación quedó varada en Hong Kong durante cinco días, en las que varias sesiones en un estudio de grabación fueron la única solución para distraerse. Aquellas canciones fortuitas tardaron dos años más en convertirse en The Magic Whip, la primera creación nueva de la banda en 12 años.

Poco después, de la mano del director Sam Wrench, la actividad de Blur tras la salida del disco y la relación entre sus integrantes se convirtieron en las piezas fundamentales del documental New World Towers, que se presentará en una única exhibición mañana en Movie Montevideo Shopping, a las 21 horas.

Además de entrevistas con los músicos, el documental incluye imágenes del regreso a la Inglaterra natal con un concierto para 60 mil personas en Hyde Park y su reencuentro en Hong Kong.

El formato documental no es nuevo para la banda, que protagonizó su primer largometraje de no-ficción en 1993, Starshaped, con entrevistas, presentaciones en vivo e imágenes que coronaron el lanzamiento de sus dos primeros discos, Leisure (1991) y Modern Life is Rubbish (1993). La segunda experiencia fue No Distance Left to Run, de 2010, realizado durante la reunión de la banda en 2009 y su subsiguiente tour.

Creada en 1988 por Damon Albarn, Graham Coxon, Alex James y Dave Rowntree, la agrupación ayudó a inaugurar una nueva era de la música inglesa junto a bandas como Oasis, Suede y Pulp. En los años siguientes, con experimentaciones con rock alternativo e indie, la banda se alejó de su inicial y característico britpop y finalmente se separó en 2003 tras el alejamiento de Coxon. Todos los miembros originales se reunieron en 2009 para una serie de conciertos que luego dieron lugar a The Magic Whip