El recorte de presupuesto destinado a áreas culturales que padeció la
Intendencia de Montevideo en 2015 fue una mala noticia para el Teatro Solís. En abril de este año su directora, Daniela Bouret, enumeraba a El Observador algunos de los problemas que esto generaría, entre ellos el apartado técnico. Según Bouret, esta era una de las áreas de mayor necesidad presupuestal, ya que desde 2004 no se realizaba una puesta a punto significativa. Ahora, gracias a una donación gestionada por la Fundación Amigos del Teatro Solís y realizada por la extranjera Charidu, el teatro renovará varios aspectos técnicos que reducirán su presupuesto y permitirán que espectáculos de mayor calibre de desarrollen con recursos propios del teatro.
Esta nueva inyección de dinero, que implicará más de US$ 200 mil, posibilitará principalmente la renovación de cuatro puntos específicos del desarrollo técnico de los espectáculos: una nueva cámara negra, una nueva consola de control de luces, un proyector de gran calibre y la renovación de la consola de audio.
Esta renovación técnica, además de aportarle aire fresco a este apartado que a veces posee la atención que merece, reducirá los costos de producción al evitar que el Solís deba recurrir al alquiler de equipos ajenos. "En algunas producciones era necesario alquilar algún equipamiento para cumplir las necesidades escénicas y los desafíos de los diferentes espectáculos. Con estas adquisiciones se va a poder cumplir con el acondicionamiento técnico del Teatro, que desde el 2004 hasta ahora no lo había tenido", explicó Bouret a El Observador.
Durante la conferencia de presentación de la donación, en la que estuvieron presentes los directivos de ambas fundaciones, así como autoridades del teatro y de la intendencia, se explicó la importancia de la renovación de cada equipo. Por citar un ejemplo, la cámara o caja negra es muchas veces la carta de presentación de una obra, luego de que se abre el telón. Ésta se compone de los elementos que visten el escenario más allá de la escenografía, como pueden ser el fondo y el tul negro que lo viste. Además, la nueva cámara negra permite mejorar las condiciones de seguridad del teatro, ya que con el tiempo su resistencia al fuego va menguando y constituye un factor de riesgo ante cualquier eventualidad.
Según Bouret, este nuevo equipamiento ya se está utilizando en los espectáculos que actualmente se están desarrollando en el teatro, sobre todo en la temporada de
ópera por el aniversario del teatro. "Cualquier espectáculo pide una plataforma mínima tecnológica para poder desarrollarse y por eso nuestro director técnico Martín Blanchet y su equipo han estado analizando el mercado internacional para saber cuáles son los equipamientos necesarios para traer, cuáles son los que cubren mejores las expectativas con mejor calidad", aseguró la directora del Solís.
Para el teatro municipal, que vio comprometida su programación por la falta de fondos a principios de año, la donación cae a la perfección y cierra el aniversario 160 de ese ícono cultural de la ciudad de la mejor forma posible.
Además, equipara gran parte del equipo técnico con otros teatros de la región, como el Colón de Buenos Aires y el propio
Auditorio Nacional del Sodre.