El testimonio de la banda que sufrió el horror de los atentados de París

Los atentados que se cometieron simultáneamente en París el 13 de noviembre causaron la muerte de 130 personas y centenares de heridos. De los fallecidos esa noche, 89 estaban en un concierto de rock en el teatro Bataclan, donde tocaba el grupo Eagles of Death Metal.
El bajista Matt McJunkins, que estaba sobre un lado del escenario que no tiene salida, cuenta que se encerró en una habitación con algunos de los espectadores. "Cuando empezó el tiroteo, tiré el bajo, me escondí un segundo detrás de las cortinas". McJunkins relata que vio que el público intentaba subir al escenario y escapar por donde él estaba. "Todo el mundo corre hacia este cuarto para escapar, instintivamente, del tiroteo". El músico no quiso cruzar el escenario y buscó refugio en la habitación. "Había gente sangrando, agarraban las sillas para trancar la puerta".

Jesse Hughes, fundador del grupo, también salió corriendo, pero a buscar a su novia. No la encontró en el camerino y la buscó en los pasillos, desde donde vio a uno de los tiradores. Huyó alertando a las personas que se dirigían hacía ahí. "Llegamos a la salida y no veía a Tuesday (su novia). Cuando escuché su voz supe que ella estaba bien", cuenta entre lágrimas.

El sonidista de la banda, Shawn London, estaba cerca de la puerta de entrada de la sala. "Escuché los tiros que venían de detrás de mí". London contó a Vice que hubo espectadores que corrieron hacia él para buscar refugio debajo de la consola de sonido. "Yo seguía parado, viendo al tirador. Me miró y me disparó, pero falló, le dio a la consola, los botones saltaron por todos lados. Ahí me tiré al piso de inmediato". El técnico dijo que escuchó al terrorista gritar "Al·lahu-àkbar" (Ala es grande) y que en ese momento se dio cuenta de qué era lo que sucedía. En un momento que no hubo disparos corrió hacia la puerta principal y una lluvia de balas rompió los vidrios antes de que él la alcanzara. No recibió impactos y pudo abandonar el teatro ileso.

Los que lograron salir fueron a una estación de Policía.

Josh Homme, baterista titular y fundador de la banda, no estuvo en el concierto en París. Se enteró casi en tiempo real por teléfono de todo lo que sucedía. Cuando piensa en el futuro de la banda, dice: "Representamos a los que no sobrevivieron, aquellos cuyas historias quizá nunca serán contadas".

Homme agrega: "Me gustaría hablar con las padres (de los fallecidos). Es una situación tan delicada... solo me pondría de rodillas y les diría: 'Lo que necesiten'".

Jesse Hughes dice muy emocionado que "una de las razones por las que tantas personas murieron es porque hubo mucha gente que no quiso abandonar a sus amigos. Muchas personas se pusieron delante de otras (para protegerlas)".

El cantante relató también cómo todos aquellos que buscaron refugio en el camerino de la banda fueron asesinados, excepto uno. "Los asesinos lograron entrar (al camerino) y mataron a todos, salvo un niño que se había escondido debajo de mi chaqueta de cuero", relató el músico.

La versión completa de la entrevista será publicada la semana que viene.

Un muerto de la banda

Nick Alexander, encargado de marketing de la gira europea de Eagles of Death Metal, murió esa noche. "Se desangró porque se quedó callado para que no lastimaran a nadie más", dijo Hughes.

El cantante cuenta en la entrevista que no ve la hora de tocar en París otra vez. "Quiero que seamos la primera banda que toque en el Bataclan cuando reabra", sentencia en un momento.

"Tenemos que terminar el tour, no tenemos otra opción. No solo por nosotros y nuestros fans, no solo por Nick Alexander, sino porque esto es nuestro modo de vida", sostiene Homme en otra parte.

También cuenta que la banda lanza una campaña para que bandas de todos los géneros que quieran colaborar con las víctimas haga un cover de su tema "I Love You All the Time" (Te amo todo el tiempo), y que los servicios de pago como iTunes y Spotify donen el dinero que esas versiones puedan generar.