Fábrica de Cervezas denuncia bloqueo ilegal de transportistas

Desde hace más de 20 años, Fábricas Nacionales de Cervezas (FNC) mantenía vínculo con 14 empresas familiares transportistas, encargadas de la distribución de bebidas en Montevideo. Este año, la fábrica decidió no renovar el contrato de trabajo y, aun haciendo todo en tiempo y forma según lo establecía el contrato, la decisión desencadenó un intenso conflicto que lleva ya más de dos meses.

Desde hace más de 10 días la distribución está suspendida, 50% de los empleados están de paro y tres plantas han sido bloqueadas. La manifestación es impulsada por la Federación de Transporte de Bebidas (Fetrabe) –a la cual están afiliados los empresarios– y la Intergremial de Transporte de Carga (ITPC).

En una planta de Montevideo, los trabajadores ubicaron camiones a ambos lados de la entrada y uno frente a la puerta, dejando libre la calle pero imposibilitando la capacidad de los camiones de pasar y maniobrar por un lugar tan estrecho. También intimidan y amenazan a quienes intentan entrar o salir con productos, prohibiendo el ingreso de cualquier otro empleado y la salida de carga.

Ahora, el foco de los manifestantes para extender las medidas está puesto en una planta que la empresa tiene en Paysandú, una de la empresa Salus y otra de una empresa de origen belga. Las dos últimas nada tienen que ver con FNC. "Si no encontramos una solución tenemos el riesgo de tener que mandar a seguro de paro a una cantidad de gente", indicó una de las fuentes de FNC. Asimismo, la empresa manifiesta que unos 25 mil comercios se ven afectados por la protesta ya que, en la medida que el bloqueo continúe, la fábrica no tiene cómo abastecerlos.

Según la Fetrabe, la fábrica rescindió el contrato de las 14 empresas, dejando a un total de 36 familias sin empleo y sin posibilidad de reinsertarse en el ámbito laboral, dado que FNC agrupa a todas las compañías cerveceras y de producción de cebada en el país. Ante ello, acusan a la fábrica de haber operado ilegalmente y reclaman que se les devuelva el empleo.

Sin embargo, el contrato que vinculaba a las empresas con la fábrica establecía dos cláusulas: que las partes tienen la posibilidad de no renovar el contrato siempre que se diera aviso con 60 días de anticipo y, en caso que ocurriera, ninguna tiene nada que reclamar a la otra.

De acuerdo con las fuentes, la empresa comunicó la decisión en una reunión con los empresarios con el anticipo correspondiente. Los empresarios de Fetrabe estuvieron de acuerdo con la no renovación y se retiraron, sin emitir reclamo alguno, informaron desde FNC. Sin embargo, las empresas no dieron cuenta a sus trabajadores de la resolución y días después iniciaron los reclamos.

Por otra parte, durante una sesión de una comisión parlamentaria, los empresarios de transporte validaron la existencia de las cláusulas que permitieron la desvinculación, pero aun así continuaron con los bloqueos. Incluso, presentaron una medida cautelar a la Justicia, solicitando que prohibiera la contratación de los 150 empleados de las empresas por parte del nuevo operador a cargo de la distribución, el Grupo Colonia SA. El pedido fue rechazado.

Cada día que pasa con la fábrica bloqueada, los comercios minoristas dejan de recibir los productos y, por lo tanto, los consumidores ven afectado el suministro. Desde FNC dijeron que de prolongarse el conflicto y las medidas, se genera incluso un perjuicio para las arcas del Estado, puesto que el negocio de la bebida genera cada día importantes aportes por la vía impositiva.