El presidente de Peñarol, el contador Juan Pedro Damiani, declara a esta hora en el juzgado de Crimen Organizado para explicar los vínculos que mantenía con Eugenio Figueredo.
Figueredo, expresidente de la
Conmebol, se encuentra procesado con prisión por un delito de estafa y de lavado de dinero y lo nombró en su declaración.
La Justicia de Crimen Organizado citó a Damiani y a dos escribanos que trabajaron con Figueredo, para que expliquen los trabajos que realizaron en conjunto con el dirigente. Los escribanos, padre e hijo, declararon este miércoles.
Damiani le vendió a Figueredo sociedades anónimas con las que compró bienes y realizó transacciones bancarias a través de las que lavó el dinero generado de forma ilícita. De todas maneras, el estudio contable del presidente de Peñarol no realizaba las tareas de administración de las sociedades ni participaba de las escrituras.
Peñarol fue uno de los siete clubes del fútbol uruguayo que presentó en Uruguay la denuncia penal contra Figueredo, en diciembre de 2013. Los clubes junto a la Mutual Uruguaya de Futbolistas Profesionales denunciaron puntualmente a Figueredo y al entonces presidente de la Asociación de Fútbol Argentino (AFA), Julio Grondona, como autores de tres delitos: asociación para delinquir, estafa y lavado de activos. Figueredo fue procesado con prisión en Uruguay por esos últimos dos delitos.
La Justicia busca determinar ahora quién colaboró con Figueredo en el lavado de activos y pretende identificar bienes que permanecen ocultos.
El 27 de mayo de 2015, Figueredo fue detenido en Suiza, junto a otros siete dirigentes de FIFA acusados de
corrupción y lavado de dinero por el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Días después, Damiani informó al
Banco Central (BCU) que le había vendido sociedades anónimas al dirigente.