Fábricas Nacionales de Cerveza (FNC) tiró este lunes 300 mil litros de cerveza que no pudo comercializar, confirmaron a El Observador fuentes de la empresa. La resolución es consecuencia del bloqueo ilegal que realiza la Federación de Transporte de Bebidas (Fetrabe) y la Intergremial de Transporte de Carga (ITC) desde hace más de 10 días.
Según dijeron las fuentes, no hay distribución de bebidas en Montevideo y tres plantas fueron bloqueadas (Montevideo, Nueva Palmira y Minas).
La Fetrabe reclama que la fábrica rescindió el contrato de las 14 empresas familiares transportistas, dejando a un total de 36 familias sin empleo y sin posibilidad de reinsertarse en el ámbito laboral, dado que FNC agrupa a todas las compañías cerveceras y de producción de cebada en el país. Ante ello, acusan a la fábrica de haber operado ilegalmente y reclaman que se les devuelva el empleo.
Por su parte, fuentes de FNC aseguraron a El Observador que la no renovación de los contratos de trabajo se hicieron en tiempo y forma acorde a dos cláusulas contractuales: que las partes tienen la posibilidad de no renovar el contrato siempre que se diera aviso con 60 días de anticipo y, en caso que ocurriera, ninguna tiene nada que reclamar a la otra.
"Si no encontramos una solución tenemos el riesgo de tener que mandar a seguro de paro a una cantidad de gente", indicó una de las fuentes de FNC. Asimismo, la empresa manifestó que unos 25 mil comercios se ven afectados por la protesta ya que, en la medida que el bloqueo continúe, la fábrica no tiene cómo abastecerlos.El gerente de la ITC, Humberto Perrone, dijo a El Observador que "no hay bloqueo", lo cual técnicamente es así ya que las puertas no están bloqueadas. Sin embargo, fuentes de la FNC dijeron a El Observador que ningún camión puede entrar o salir de la planta ya que se colocaron otras unidades en la misma cuadra -como forma de protesta- y eso limita las maniobras de ingreso con otros vehículos a las plantas.
Según Perrone, el conflicto se está extendiendo en el tiempo "porque la FNC lleva los tiempos a su antojo", y le adjudica la responsabilidad de la bebida que se descartará a "un problema 100% de gerenciamiento de la fábrica". Estaba previsto que los distribuidores recibieran una respuesta a sus demandas el pasado jueves, pero nunca llegó. "Toda las respuestas vienen de Argentina. El viernes avisaron que no había respuesta. No trabajaron ni sábado ni domingo, y la respuesta tendría que estar hoy pero aún no llegó", señaló Perrone.
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