Gobierno acelera definición sobre futuro de las frecuencias de Pluna

Anoche, Mujica recibió al empresario argentino Juan Carlos López Mena en su despacho de Torre Ejecutiva. El empresario le llevó su plan de negocios, que consiste en explotar las rutas en reserva por el Poder Ejecutivo, a cambio de incorporar personal de la exPluna y arrendando los aviones Bombardier del remate.

Además, el sindicato de empleados de la aerolínea de bandera le llevaron al ministro Pintado una propuesta de asociación con una empresa europea, para operar las frecuencias utilizando los otros seis aviones Bombardier de Pluna, adquiridos en leasing (arrendamiento con derecho a compra). Según informó anoche Presidencia, Mujica ordenó formar una comisión con varios ministerios para analizar los aspectos técnicos y jurídicos de la propuesta de López Mena.

La foto de portada de El Observador, publicada en la edición de ayer, adonde se demuestra el encuentro secreto entre el ministro Fernando Lorenzo, López Mena y el representante de la compañía española Cosmo, Antonio Sánchez, ardió en las redes sociales y aceleró los procesos y el plan de López Mena, titular de la naviera Buquebús y de la aerolínea BQB. El empresario argentino tenía pensado terminar la ronda de contactos con el gobierno y presentar su plan de negocios el viernes, pero decidió blanquear parte de sus intenciones el miércoles, por medio de un comunicado de prensa, cuando se percató de haber sido fotografiado.

La desconocida empresa de capitales españoles Cosmo, de quien solo se conoce la cara de su representante en la subasta extrajudicial de los siete aviones Bombardier del lunes, también generó muchas dudas. En un principio manejó que tenía intenciones de llevarse las naves que pertenecían a la flota de Pluna para realizar vuelos chárter en Europa, lo que ratificó en un comunicado oficial. Sin embargo, dos días después se conoció que avanzaba en conversaciones con BQB para dejarlos en Uruguay y arrendarlos. Al quedarse y no cumplir con su anuncio presuntamente oficial, Comso agiganta las dudas y alimenta suspicacias.

Todo el “Plunagate” (como comenzó a llamar la oposición al caso) deja al gobierno en falsa escuadra al comienzo del proceso, y condiciona ahora cada paso que pretenda dar.

Las dudas

En 48 horas, el gobierno pasó de sentir satisfacción por la salida que comenzaba a construir para la crisis post Pluna, a estar bajo sospecha de la oposición y los funcionarios de la exaerolínea de bandera de haber hecho un arreglo previo con el empresario Juan Carlos López Mena y los españoles que ganaron la subasta. Blancos y colorados coincidieron ayer en las dudas y anunciaron una interpelación a los ministros Lorenzo y Enrique Pintado (Transporte y Obras Públicas).

Los extrabajadores de la aerolínea fueron más allá y acusaron a Lorenzo de “corrupto”, “vende patria” y “ladrón”, entre otros tantos insultos. Ayer al mediodía el ministro ingresaba a su oficina caminando y fue escoltado por una decena de exfuncionarios. A los gritos, los trabajadores le refregaron la foto publicada por El Observador del almuerzo que había mantenido con el empresario argentino Juan Carlos López Mena y el representante español de la empresa Cosmo, Antonio Sánchez, en el restaurante Lindolfo de la Aduana.

Esa foto lo que reveló fue que el gobierno estaba negociando en conjunto con López Mena y los españoles de Cosmo previo a que se conociera un eventual acuerdo entre esos dos privados. Además, eso alimentó las especulaciones de los funcionarios y la oposición política de que el empresario de BQB y los europeos tenían un arreglo previo a la subasta.

Ayer el presidente José Mujica avaló esas conjeturas. En diálogo con Subrayado admitió él “especula” que López Mena y los españoles se conocieran. Dijo que el empresario argentino “tiene ciertas actividades, mueve parte de los Buquebus en el tráfico entre España y Marruecos en verano. Es posible que tengan cierto conocimiento”, señaló el mandatario. Todo ello alimenta la hipótesis de que el presidente tenía un adelanto del desenlace actual.

A ello se le agrega que Mujica tenía la convicción de que la subasta iba a durar cinco minutos, y así lo comentó en medio de su viaje el lunes a Lima (Perú), según relató ayer el semanario Búsqueda. Efectivamente, el remate se terminó en siete minutos, con la oferta de US$137 millones del representante de Cosmo.