Una mayoría de la población griega se ha pronunciado en contra de la propuesta de acuerdo de los acreedores de ese país. Datos oficiales señalan un aplastante 61,5% a favor del "no" y un 38,5% a favor del "sí". De hecho, se dice que Grecia ya pidió una vez más medidas que aseguren liquidez de emergencia al Banco Central Europeo.
Según el sitio de noticias Reported.ly y la BBC, una multitud de ciudadanos griegos se concentra todavía en las calles de Atenas y otras ciudades para celebrar el triunfo, mientras los analistas señalan que Europa deberá ofrecer algún tipo de alivio al pedido de que Grecia asuma sus obligaciones.
Cuando finalmente se cuenten los votos, en el caso que gane el No –lo que ha pedido a su pueblo el primer ministro griego Alexis Tsipras–, Grecia cree que va a tener una posición negociadora más fuerte. A esto, el resto de Europa responde que no cambiará las condiciones del plan que propone para salvar a Grecia, que ya ha entrado en default con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y se acerca a hacerlo con otros acreedores.
Los griegos que se manifestaban a favor del "sí" dicen que la oferta recibida por Grecia es dura, pero la alternativa, el colapso de los bancos y la vuelta a la antigua moneda, el dracma, sería mucho peor.
Los partidarios del "no" dicen que Grecia no se puede permitir más austeridad, que ha dejado a uno de cada cuatro griegos sin trabajo.
¿Qué pasará de ahora en más?
En primer lugar, Grecia enfrente una situación más complicada tras decir "no". Yanis Varoufakis, primer ministro financiero griego, aseguró que "el no es un sí a la Europa democrática" y que "esto de trata de pedir más reformas y menos recortes". Se espera que los líderes de Francia y Alemania, Hollande y Merkel, se reúnan en París mañana para decidir los pasos a seguir. Luego se supo a través del presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk.
Por lo pronto, el ministro de Economía alemán Sigmar Gabriel, ha dicho tras conocerse los resultados que "Grecia ha derribado los puentes con el resto de Europa".
Grecia, ya en situación de Mora frente al Fondo Monetario Internacional (FMI) y ahora necesita además más de 6.800 millones de euros para distintos vencimientos en julio. Según los analistas, el vencimiento clave es el del día 20. Allí deberán pagar al Banco Central Europeo 3.620 millones de euros, lo cual parece difícil que puedan hacer sin acuerdo con los socios europeos.
Al no poder enfrentar estos pagos, el BCE puede (de hecho está obligado por ley) cortar la financiación del sistema griego, lo cual marcaría un colapso automático de su economía. En el caso de que Grecia salga del euro para pasar a su moneda -el Dracma- se estima que esta tendría un 70% menos del valor de cotización de la divisa común europea.
Lo que sí queda claro, mientras los ministros del Eurogrupo se dan por enterados de la medida adoptada en Grecia, es que el país ahora corre contra el tiempo: deberá pedir soluciones a los prestadores de crédito antes de que el sistema económico colapse y pueda complicar más a la región.
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá