Gremios amenazan con conflicto si no se quitan metas del convenio

Fenapes y Afutu, que un principio rechazaron la propuesta, realizan la nueva discusión a contrarreloj, ya que tienen tiempo para acordar hasta el 31 de diciembre. Si llegada esta fecha no lo hicieron, no recibirán incrementos entre 2016 y 2017, más allá de los ajustes anuales por inflación. Sin embargo, los sindicatos intentan presionar hasta último momento y advierten que de no firmar el convenio, quedarían "libres" para tomar medidas de protesta el año que viene. Fuentes del Ministerio de Trabajo aseguraron a El Observador que pese a que tomen medidas no lograran ningún aumento porque así lo indica el presupuesto que fue aprobado ayer. Es la asignación presupuestal que allí se establece, o ese dinero será redistribuido en políticas educativos.

La nueva propuesta del Ejecutivo, a la que tuvo acceso El Observador, fechada el 27 de noviembre y firmada por el ministro de Trabajo, Ernesto Murro, es muy similar a la del 31 de agosto. Las diferencias se encuentran en la redacción, la cual tiende a ser más clara y concreta en los aspectos que tienen que ver con la cláusula de paz y el cumplimiento de planes y cronogramas.

En la propuesta del 31 de agosto, el gobierno propuso a los sindicatos llegar a 2020 con un salario mínimo para los docentes grado 1 -aquellos que recién ingresan al sistema- equivalente a $ 25 mil, con un incremento anual de 3,5% por encima del Índice de Precios al Consumidor (IPC). Esta parte en la nueva redacción no cambia.

La nueva propuesta

Los cambios de redacción se concentran en los artículos 9º, 10º y 11º. En el artículo 9º, la propuesta del 31 de agosto establecía el compromiso de la partes a cumplir con "los cronogramas dispuestos en los respectivos planes y programas de estudio de ANEP".

Desde un principio esta consigna no cayó bien entre los sindicatos de la educación por entender que en la enseñanza los cronogramas no son medibles tan fácilmente. Se oponen a dar los programas tal como están planteados por el solo hecho de cumplirlos, sin considerar si los alumnos aprenden correctamente, y las particularidades de cada grupo.

A su vez, el artículo 10º de la primera propuesta proponía una cláusula de paz, por la cual los sindicatos se comprometían "a no realizar acciones que contradigan lo pactado", hasta el 1º de abril de 2017. La nueva redacción cambia "lo pactado" por "lo establecido en el presente convenio". Del mismo modo, indicaba que quedaban "excluidos del alcance de esta cláusula la adhesión de medidas sindicales convocadas con carácter general por el PIT-CNT o en forma simultánea por todas las ramas del sector público". En este párrafo, la nueva propuesta agrega como excepciones las convocatorias realizadas por la Coordinadora de Sindicatos de la Enseñanza (CSEU) y aclara que están fuera de lo acordado aquellas movilizaciones "ajenas a lo convenido". Fuentes sindicales consultadas manifestaron que estas aclaraciones son positivas porque dejan claro que de acordar con el Ejecutivo, los sindicatos podrán movilizarse por cualquier otro motivo que no sea el salarial.

En tanto, el artículo 11º establecía que en casos de controversias, se convocaría a un ámbito bipartito para hallar una solución. En este caso, lo único que aclara la nueva propuesta es que las controversias deberán estar referidas al convenio firmado. Por último, la propuesta del 31 de agosto indica la instalación de una comisión bipartita entre ANEP y sindicatos para establecer los compromisos que mejoren la gestión. Sobre este aspecto no se realizaron cambios.

Reacción

Afutu y Fenapes convocaron a sus ámbitos de decisión para analizar la nueva propuesta y definir su postura. Fenapes lo hará el sábado 19 y Afutu, el martes 22.

El presidente de Afutu, Daniel Devitta dijo a El Observador que las filiales proclives a acordar son las del interior. En tanto, Nelson Jaurena, dirigente de Afutu Montevideo manifestó a El Observador que no hay ambiente para aprobar la propuesta, ya que los cambios son mínimos. Expresó que si el gobierno no quita del convenio el artículo que crea la comisión para fijar las metas, Afutu no aceptará. "En definitiva es como estar aceptando las metas", indicó. Del mismo modo, indicó que de no firmar el convenio, los sindicatos quedan "libres" para tomar acciones el año que viene.

En tanto, en Fenapes de 56 filiales son 18 las que pidieron reconsiderar el tema en una nueva asamblea. Mario Bango, dirigente de Fenapes, concordó con Jaurena en que los cambios que propone el Ejecutivo son mínimos. Además, señaló que en ningún lado del convenio se especifica que el aumento anual será de 3,5%. Por su parte, Luis Martínez, dirigente de Fenapes, dijo que de no aprobar la propuesta, para el año que viene no se descarta nada. Dijo que el sábado además de fijar postura frente al convenio, también pueden resolver un plan de acción.

Los maestros aceptaron

La FUM resolvió firmar el convenio el sábado 28 de noviembre, un día después que el ministro Ernesto Murro presentara la propuesta. Elbia Pereira, secretaria general de la FUM, dijo a El Observador que los maestros aprobaron la propuesta con estos cambios ya incluidos, por lo tanto se van a ver beneficiados de ellos. Consideró que la propuesta del Ejecutivo no contempla las aspiraciones del sindicato, pero peor sería dejar a todos los maestros - también los que no están afiliados- sin aumento. Los sindicatos de la educación reclamaban llegar a 2020 con un salario mínimo para un docente grado 1 equivalente de $ 30.000.