Desde hace 80 días el exdictador Gregorio Álvarez se encuentra internado en el Hospital Militar a raíz de un accidente cardiovascular (ACV)que sufrió en la cárcel Domingo Arena, mientras cumplía su condena por violaciones a los derechos humanos.
El abogado de Álvarez, Pedro Monterio, pidió reiteradas ocasiones que su defendido cumpla prisión domiciliaria debido a su edad -89 años- y a su estado de salud.
La Diaria informó este jueves que el exdictador ya no tiene pertenencias en la cárcel Domingo Arena, dado que sus familiares las retiraron luego de que el exmilitar sufrió el ACV.
Además, el matutino explicó que su estado de salud demora la concreción de un tribunal de honor al que deben someterse los militares que tienen sentencia firme, como es el caso de Álvarez, Juan Carlos Larcebeau, José Gavazzo, Ricardo Arab, Gilberto Vázquez, Ernesto Ramas, Luis Maurente y Jorge Silveira. El código militar indica que estos tribunales tienen que ser integrados por oficiales retirados de jerarquía similar. El tribunal de honor estará conformado por los excomandantes Jorge Rosales, Carlos Díaz y Ángel Bertolotti, que ejercieron durante la primera presidencia de Tabaré Vázquez.
El matutino informó que la dificultad para tomarle declaración a Álvarez es que tiene una parálisis y no responde a lo que se le pregunta.
El ministro de
Defensa,
Eleuterio Fernández Huidobro dijo en declaraciones a La Diaria que se encuentra "filosóficamente" en desacuerdo con los tribunales de honor, puesto que son "para cobrar cuentas entre ellos". Si el tribunal llega a la conclusión de que el militar no representó con "honestidad y ética profesional" a las
Fuerzas Armadas se le puede llegar a quitar la condición de militar, una de las sanciones más graves del código. Eso también implica que ya no podría usar uniforme, ni ser atendido en el Hospital Militar.
La jubilación, en cambio, pueden seguir cobrándola a través de sus familiares.