Desde el año 2000 la activista india Irom Sharmila, conocida como la "dama de hierro de Manipur", comenzó una huelga de hambre después de que diez civiles murieran a manos de soldados bajo el amparo de una ley que otorga a los militares amplios poderes para arrestar y matar sospechosos con impunidad en su país.
La mujer de 44 años se encuentra bajo custodia policial en un hospital de India, donde es forzada por las autoridades a ingerir
alimentos a través de una sonda en su nariz.
Esta semana, a través de sus portavoces, Sharamila anunció que pondrá fin el próximo 9 de agosto a casi 16 años de huelga de hambre para presentarse como candidata independiente en las elecciones del estado de Manipur (noreste).
La activista hizo el anuncio tras una de sus rutinarias comparecencias en una corte de Imphal, capital regional.
"Dijo que pondrá fin a su ayuno en su próxima aparición ante el tribunal, que será el 9 de agosto, y se presentará a las próximas elecciones en Manipur como candidata independiente sin afiliarse a ningún partido político", explicó Babloo Loitongban, portavoz de la activista.
El hombre añadió que no sabe con certeza qué pudo llevar a Sharmila a tomar esa decisión, pero anotó que la activista había estado pensando en "hacer un cambio" a su estrategia tras asimilar que lo que no había logrado en casi 16 años "no lo lograría en 30".
Sharmila se opone a una Ley de Facultades Especiales de las Fuerzas Armadas (AFSPA), que otorga poderes extraordinarios a los cuerpos de seguridad en "zonas en
conflicto", incluido el uso de fuerza letal contra toda persona que incumpla leyes u órdenes y la capacidad de actuar sin necesidad de mandatos judiciales.
Según han criticado varias organizaciones pro
derechos humanos como Amnistía Internacional, el Ejército se escuda en la AFSPA, que fue aprobada por el Parlamento indio en 1958 para combatir a grupos secesionistas, para "ejecutar y torturar con impunidad".
Desde que comenzó la protesta, Sharmila apenas ha conocido la libertad al permanecer bajo arresto por una ley contra el suicidio, porque aunque es liberada anualmente al cumplir 364 días de arresto, el máximo legal permitido, había sido encerrada de inmediato de nuevo al negarse a poner fin a su ayuno.