Marei es uno de los personajes de reparto de
Game of Thrones que aparecen poco en la serie, pero ayudan a conformar y darle diversidad al mundo de Poniente, en el que transcurre la historia de la serie. Es interpretado por Josephine Gillan, una actriz a la que la serie sacó del mundo de la prostitución.
Gillan contó al diario inglés Daily Mail que se dedicaba a esa actividad, hasta que vio en un sitio web para actrices el llamado de la serie. GIllian se postuló y fue contratada para la segunda temporada de la serie de HBO. Desde entonces, ha aparecido al menos una vez por temporada, y ya tiene confirmado su retorno para la séptima.
Gillan, quien tuvo una infancia y juventud repleta de abusos sexuales, drogadicción y problemas familiares, asegura que la serie "ha cambiado su vida", ya que le ha permitido iniciar una carrera como actriz. Ya ha filmado dos películas independientes, y viajará a México para el rodaje de una película de terror. Y si bien su personaje en
Game of Thrones es el de una cortesana, reconoce que sin este rol, su vida seguiría como antes.