La expansión constante de Disney

Disney es la dueña del mundo del entretenimiento por segundo año consecutivo. A comienzos de este mes, la empresa anunció que batió su propio récord de taquilla en un solo año, con US$ 5.851 millones recaudados. El año pasado la cifra se quedó en US$ 5.843 millones. Es que en esta época, lo más importante para un estudio no es la creatividad de sus trabajadores, sino las franquicias de las que posee los derechos. En la era de las películas en serie eternas e interconectadas, Disney cuenta con las más importantes.

Le compañía posee las cuatro películas más taquilleras a nivel mundial del año: Capitán América: Civil War, Buscando a Dory, Zootopia y El libro de la Selva. Doctor Strange se acerca a toda velocidad al top 10 anual, y aún no se ha estrenado Rogue One, ambientada en la galaxia de Star Wars.

Pero Disney no solo reina en el cine. La televisión e incluso los servicios de streaming son campo fértil para la empresa, donde sus propiedades presentan diversos productos.

Y el imperio sigue expandiéndose, con rumores que indican que la empresa intentará adquirir nada menos que a Netflix, el gigante mundial del streaming. Esta idea gira desde hace un tiempo en los portales económicos estadounidenses, aunque de momento no hay nada concreto.

Sin embargo, la idea de que Disney se apropie de Netflix sería la consolidación de la casa del Ratón Mickey como la más poderosa de las grandes instituciones de Hollywood, incorporando al sitio a su cartera en la que ya reposan ESPN, Pixar, Marvel y Lucasfilm, la dueña de Star Wars e Indiana Jones.

El año pasado Disney tuvo una dura batalla con Universal, que de la mano de Minions, Rápido y Furioso y Jurassic World también logró varios miles de millones de dólares. Warner posee a los superhéroes de DC Comics, las películas de Lego y la franquicia Harry Potter; Fox guarda los derechos de los X-men, Kung Fu Panda y La Era de Hielo; Sony cuenta con Cazafantasmas, Resident Evil y la copropiedad (justamente junto a Disney) del Hombre Araña, mientras que el estudio Lionsgate es la dueña de Los juegos del hambre y la futura versión de los Power Rangers. Pero aparentemente, ninguno puede competir con el imperio Disney.