Es por eso que la noticia de que One Direction, la boyband más exitosa de los últimos cinco años, decidiera separarse por un tiempo para dedicarse a sus proyectos por separado es, por lo menos, interesante.
El quinteto devenido en cuarteto pone una pausa en una carrera que, desde que finalizaron terceros en el reality The X Factor, literalmente no paró. Salieron del programa con un contrato discográfico gracias a su creador, Simon Cowell, y desde 2011 lanzaron un disco por año. Para garantizar su dominación mundial cada uno fue acompañado por giras de meses de duración. Protagonizaron dos películas: This Is Us, una clásica historia de los orígenes a las estrellas de hoy, y One Direction: Where We Are - The Concert Film, que, como su nombre indica, es un concierto grabado durante dos shows en Milán.
Según Forbes se ubican en el cuarto puesto de artistas mejor pagados, con US$ 130 millones ganados en 2014 y según sus representantes vendieron más de 50 millones de discos y se presentaron ante más de 7,5 millones de fanáticas en todo el mundo. Como le deben todo a sus fans, se trata de un grupo comprometido con la comunicación digital: 38 millones de usuarios los siguen en Facebook, 24 millones en Twitter y otros 10 millones en Instagram. Y en lo que queda del año –mientras no estén de gira– editarán su quinto trabajo, del cual ya lanzaron su primer corte, Drag Me Down.
Solo un breve repaso de fechas y cifras como este deja claro lo poco sorpresivo de esta noticia. One Direction, la empresa, ha tenido un quinquenio excelente, pero a fuerza de tener la fábrica funcionando sin parar. Y los resultados de esa sobrecarga ya se empezaron a notar.
En marzo Zayn Malik abandonó el grupo, alegando que quería ser un "chico de 22 años normal" fuera de los focos, solo para unos meses después confirmar que comenzaría a trabajar en un carrera solista y volver a los titulares de la prensa rosa por romper su compromiso con su novia Perrie Edwards, miembro del girl group inglés Little Mix. A pesar de esa gran pérdida el cuarteto continuó sus compromisos y se enfocó en grabar su próximo disco. Y, por si fuera poco, Louis Tomlinson confirmó a principios de mes que será padre, noticia que escandalizó a las fans.
Según los reportes y conjeturas, se concentrarán en posibles carreras solistas, en la paternidad o en la actuación.
Esta "separación temporal" podrá servir tanto para cargar las baterías o reconfigurar el grupo, como para extender el período de validez de su formato. De acuerdo con la historia marcada por sus antecesores, hay dos factores determinantes para la irremediable caída: la pérdida de uno de los miembros, llegar al quinto año de vida o simplemente crecer (ver recuadro). Y en el caso de One Direction, los dos primeros puntos ya sucedieron.
En noviembre del año pasado, en entrevista con The Guardian, el grupo desestimó cualquier sugerencia de cansancio. "Somos muy trabajadores", dijo Liam Payne, "Lo disfrutamos más que nada. No hay agotamiento". Lo que incluso en ese entonces pareció una respuesta mecánica, se corrigió hace un mes: "Creo que todos necesitamos un descanso", dijo a un programa de radio. Y lo tienen más que merecido.Inicio de sesión
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