La oposición dispuesta a aumentar penas a narcos; el FA no lo decidió

En febrero de 1989, la Policía uruguaya detuvo a Raúl Vivas, un joyero argentino que operaba el Cambio Italia en la avenida Gorlero de Punta del Este, frente al casino Nogaró. "Yo lo investigué. Fue hace muchos años, cuando Raúl Vivas lavó en nuestro país US$ 1.200 millones para Pablo Escobar", recordó en una entrevista con el diario La República publicada en mayo el actual secretario antilavado, Carlos Díaz. Vivas fue condenado en Estados Unidos donde cumple una pena de 505 años por lavado de dinero para el narcotráfico.

Un cuarto de siglo después, Uruguay es una plaza regional de lavado de dinero producto de la evasión fiscal, como admitió en abril el gerente de la Unidad de Información y Análisis Financiero (UIAF) del Banco Central, Daniel Espinosa, y un país en el que operan ramas de cárteles internacionales de droga, como advirtió esta semana el juez de Crimen Organizado, Néstor Valetti.

En ese contexto, Valetti propuso esta semana aumentar las penas para el tráfico de cocaína e igualarlas, así, con las del tráfico de pasta base. "Hay ramas de carteles en Uruguay y para ellos el gran negocio es el tránsito de cocaína hacia Europa", dijo Valetti a El Observador.

La propuesta del magistrado, que es apoyada por el fiscal de Crimen Organizado Gilberto Rodríguez, pretende solucionar un problema pendiente en el Poder Judicial: la ley que aumentó las penas de la pasta base no se puede aplicar porque el Instituto Técnico Forense no tiene la tecnología necesaria para distinguir con precisión científica entre clorohidrato y pasta base de cocaína, por lo que los jueces no pueden sancionar con penas mayores a los traficantes de pasta base. Por eso, el tráfico de cocaína y de pasta base sigue siendo un delito en los hechos excarcelable, que tiene una pena mínima de 20 meses de prisión, por lo que es excarcelable (los delitos son excarcelables cuando la pena mínima es de menos 24 meses de penitenciaría).

El Observador consultó sobre esta propuesta a los cuatro senadores que el martes participaron del seminario "El Poder Judicial y su futuro inmediato", que se realizó en la sede del Colegio de Abogados del Uruguay. Los tres legisladores de la oposición que disertaron, Lacalle Pou, Pedro Bordaberry y Pablo Mieres, apoyan la iniciativa de Valetti de aumentar las penas para el tráfico de cocaína. Por el contrario, el senador del Frente Amplio, Rafael Michelini, prefirió no emitir opinión hasta conocer el texto del proyecto de ley.

Lacalle Pou recordó que el 10 de noviembre del 2010 presentó un proyecto de ley con un conjunto de medidas contra el narcotráfico, entre la que aparecía la despenalización del autocultivo de marihuana y el aumento de todas las penas para narcotráfico, sin importar la droga. "Mi proyecto de ley contra el narcotráfico proponía que todas las penas sean inexcarcelables", dijo el senador blanco a El Observador.

Por su parte, Bordaberry aseguró que le parece "sensato" que se aumenten las penas para los traficantes de cocaína. Mieres dijo que le parece bien la propuesta del juez Valetti. "Es una solución técnica correcta" para evitar que no se aplique la ley que aumenta las penas para los traficantes de pasta base.

Por otro lado, el senador Michelini explicó que no se expedirá hasta conocer el texto del proyecto. "No puedo opinar al grito. Cuando se eleve la ley o alguien haga el planteo, lo analizaremos. En su oportunidad se quiso hacer una diferencia muy grande entre pasta base y el resto de las drogas. Se dieron argumentos científicos. Veremos de qué manera se puede aplicar la ley. En su momento, se argumentó que las otras drogas merecen un tratamiento distinto", aseguró.