Con un filme sobre el auge del populismo en el que destaca una líder que recuerda a la francesa Marine Le Pen, el director Lucas Belvaux espera influir en las elecciones presidenciales francesas de este año en las que la ultraderechista parte con buen pie.
"Chez nous" (Nuestra casa), que se estrena este miércoles en Francia, muestra la carrera política de una enfermera de una pequeña ciudad que se presenta a elecciones locales en la lista de un partido de extrema derecha llamado Bloque Patriótico.
Las posiciones nacionalistas y antiinmigrantes del partido y el pelo rubio de su líder, encarnada por la actriz Catherine Jacob, recuerdan claramente al Frente Nacional (FN) y a Marine Le Pen.
El título de la película rememora el eslogan "estamos en nuestra casa" coreado en las reuniones del FN.
"Hicimos todo lo posible para estrenar la película antes de las elecciones presidenciales" a dos vueltas del 23 de abril y del 7 de mayo, dijo Belvaux en una entrevista con la revista Telerama.
"Quiero que los electores entiendan lo que avalan exactamente cuando votan por el FN", señaló el cineasta quien estimó en una entrevista con el diario L'Humanité que este partido es "racista y antisemita".
La película empieza con imágenes de las casas de ladrillo típicas del norte de Francia, una región marcada por altas tasas de desempleo y desindustrialización.
Este feudo tradicional de la izquierda francesa se convirtió en los últimos años en un bastión del Frente Nacional.
"Ustedes no hicieron más que hablar de la revolución, nosotros la vamos a poner en marcha", recrimina en el filme Pauline a su padre, un veterano militante comunista, consternado por el giro político de su hija.
En el filme, los partidarios de la agrupación no son todos caricaturizados como extremistas. Muchos se describen como víctimas de la globalización, de la decadencia de los servicios públicos y de la inseguridad, seducidos por promesas de justicia social y de un Estado "fuerte y protector".
"Lo que vemos públicamente de Marine Le Pen es una fabricación", estimó Lucas Belvaux al diario L'Humanité. "He visto de cerca a otros dirigentes de extrema derecha en Europa, todos salen del mismo molde", agregó.
El FN, que había criticado al largometraje antes de su estreno, tachándolo de "propaganda anti-FN", rechaza estas acusaciones y se define como un partido "patriota" frente a los "mundialistas" y "europeistas".
Las encuestas vaticinan que Marine Le Pen pasará a la segunda vuelta de las elecciones en mayo, frente a una izquierda dividida y una derecha debilitada por un escándalo financiero.
La líder ultraderechista logró suavizar la imagen del partido fundado por su padre, Jean-Marie Le Pen, quien fue condenado varias veces por la Justicia por declaraciones antisemitas o xenófobas.
Es justamente esta estrategia que quiso denunciar Belvaux. "El Frente Nacional se presenta como un partido patriota pero en realidad odia a Francia como es, con sus múltiples identidades", afirmó el cineasta.
Una decena de simpatizantes del FN se manifestaron el miércoles frente a un cine de la ciudad de Hénin-Beaumont, un antiguo bastión socialista dirigido ahora por un alcalde ultraderechista.
"Queremos mostrar nuestra oposición a esta película irreal que no representa al partido ni a sus votantes", dijo Laurent Dassonville, un responsable del FN de esta región norteña. "No es normal que se autorice esta película en pleno período electoral", denunció.
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