Mundo > CORRUPCIÓN
Líder oficialista en el Senado de Brasil pagó y recibió sobornos
Arrestaron a Delcídio Amaral, que participó en el caso Petrobras
Tiempo de lectura: -'
26 de noviembre de 2015 a las 05:00
El senador brasileño Delcídio Amaral, líder de las fuerzas oficialistas en la Cámara alta, fue arrestado porque presuntamente recibió sobornos y pagó coimas en el marco de laso Petrobras. Fue detenido en su casa ayer de mañana.
Amaral, del Partido de los Trabajadores (PT), fuerza de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, es uno de los 50 políticos que están siendo investigados por su supuesta implicación en el caso Petrobras, que se refiere al desvío de fondos millonarios de la petrolera estatal.
Según las investigaciones, la red de corrupción enquistada en Petrobras adjudicaba contratos a empresas privadas en forma fraudulenta, inflaba sus valores y repartía los beneficios entre exdirectivos de la estatal y los políticos que permitían esas operaciones ilegales.
La misma Petrobras reconoció en sus balances que los fraudes le causaron perjuicios financieros por US$ 2.000 millones en la última década.
Un empresario arrestado por el caso se acogió al acuerdo de colaboración con la Justicia y denunció que Amaral recibió sobornos de entre US$ 250.000 y US$ 400.000 aproximadamente por el contrato de compra de una refinería en Estados Unidos por parte de Petrobras.
La compra de esa refinería de Pasadena (en Texas), se realizó en 2006 y es uno de los negocios más polémicos que realizó la petrolera en los últimos años, puesto que la empresa brasileña pagó US$ 1.180 millones a la compañía belga Astra Oil, que en 2005 había pagado US$ 42,5 millones por esa misma planta.
Según la Fiscalía, Amaral hizo un pacto con el detenido Nestor Cerveró, que colaboraba con la Justicia, y le pagó unos US$ 13.300 por mes a cambio de que este no lo nombrara ante las autoridades.
Según documentos y grabaciones obtenidas por la Procuraduría, Amaral también se comprometió a mediar ante jueces del Supremo a fin de que Cerveró fuera declarado inocente o, al menos, aliviasen su condena por las corruptelas en Petrobras.
Ayer también fueron detenidos el jefe de gabinete del senador, Diogo Ferreira, y el banquero André Esteves, uno de los socios del banco de inversión BTG Pactual.
Hace tres años, Esteves entró en la lista de las 20 personas más acaudaladas de Brasil, con una fortuna calculada en unos US$ 3.000 millones.
El banco BTG Pactual divulgó una nota en la que dijo desconocer los motivos que llevaron a la detención de uno de sus socios, pero se mostró dispuesto a prestar toda la colaboración necesaria a las autoridades judiciales.
Según fuentes oficiales, la detención del senador Delcídio Amaral “sorprendió” al gobierno de Dilma Rousseff, que no se la esperaba.
Amaral, del Partido de los Trabajadores (PT), fuerza de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, es uno de los 50 políticos que están siendo investigados por su supuesta implicación en el caso Petrobras, que se refiere al desvío de fondos millonarios de la petrolera estatal.
Según las investigaciones, la red de corrupción enquistada en Petrobras adjudicaba contratos a empresas privadas en forma fraudulenta, inflaba sus valores y repartía los beneficios entre exdirectivos de la estatal y los políticos que permitían esas operaciones ilegales.
La misma Petrobras reconoció en sus balances que los fraudes le causaron perjuicios financieros por US$ 2.000 millones en la última década.
Un empresario arrestado por el caso se acogió al acuerdo de colaboración con la Justicia y denunció que Amaral recibió sobornos de entre US$ 250.000 y US$ 400.000 aproximadamente por el contrato de compra de una refinería en Estados Unidos por parte de Petrobras.
La compra de esa refinería de Pasadena (en Texas), se realizó en 2006 y es uno de los negocios más polémicos que realizó la petrolera en los últimos años, puesto que la empresa brasileña pagó US$ 1.180 millones a la compañía belga Astra Oil, que en 2005 había pagado US$ 42,5 millones por esa misma planta.
Dar y recibir
Por otra parte, ayer el magistrado Teori Zavascki, miembro del Tribunal Supremo y quien ordenó la detención del legislador, aseguró que Amaral intentó sobornar a uno de los arrestados por el caso, para intentar evitar que colaborase con la Justicia.Según la Fiscalía, Amaral hizo un pacto con el detenido Nestor Cerveró, que colaboraba con la Justicia, y le pagó unos US$ 13.300 por mes a cambio de que este no lo nombrara ante las autoridades.
Según documentos y grabaciones obtenidas por la Procuraduría, Amaral también se comprometió a mediar ante jueces del Supremo a fin de que Cerveró fuera declarado inocente o, al menos, aliviasen su condena por las corruptelas en Petrobras.
Ayer también fueron detenidos el jefe de gabinete del senador, Diogo Ferreira, y el banquero André Esteves, uno de los socios del banco de inversión BTG Pactual.
Hace tres años, Esteves entró en la lista de las 20 personas más acaudaladas de Brasil, con una fortuna calculada en unos US$ 3.000 millones.
El banco BTG Pactual divulgó una nota en la que dijo desconocer los motivos que llevaron a la detención de uno de sus socios, pero se mostró dispuesto a prestar toda la colaboración necesaria a las autoridades judiciales.
Según fuentes oficiales, la detención del senador Delcídio Amaral “sorprendió” al gobierno de Dilma Rousseff, que no se la esperaba.
