Una delegación del Ministerio de la Agricultura, Ganadería y Abastecimiento (MAPA) brasileño llegará este lunes al país para reunirse con técnicos del Ministerio de Ganadería Agricultura y Pesca (MGAP) y terminar de solucionar el conflicto por los productos
lácteos generado a partir de la decisión del gobierno de Brasil de suspender la importación de estos productos.
El presidente brasileño Michel Temer llamó el viernes al mandatario uruguayo, Tabaré Vázquez, para calmar las aguas e informarle que la decisión había sido revertida y acordaron la llegada de esta delegación. "Temer me pidió disculpas y me prometió la situación se normalizará en breve", contó Vázquez a El Observador.
Según relató el mandatario, Temer admitió que todo se trató de una "desinteligencia". "Me dijo que esto iba camino a convertirse en un gran circo mediático y que él tenía la voluntad de solucionarlo por eso me llamó personalmente", agregó.
Brasil había decidido suspender la importación de lácteos alegando que la leche que exporta Uruguay no es genuinamente producida en el país, sino que se vale de triangulaciones por las cuales se importan productos para luego reexportarlos a costos menores. Esa acusación fue negada por el ministro de
Ganadería, Tabaré Aguerre.
Cuando se conoció la decisión de Brasil de frenar el ingreso de lácteos provenientes de Uruguay, el MGAP anunció que aplicaría "medidas espejo" al aumentar inspecciones e intervenciones a las mercaderías que llegan desde Brasil.