“Los corrales de engorde tienen que mejorar la conversión del alimento para ser rentables”

¿Cómo ve a la ganadería?
Con grandes posibilidades. Primero porque hay mercados demandantes por el producto y esos mercados tiran de la cadena y estimulan al sector primario a producir. El segundo factor positivo es que existe tecnología que de una manera exigente económicamente permite generar más producto para mejorar el resultado económico de las empresas y por lo tanto el ingreso de las familias. Y tercero porque a nivel nacional están dadas las condiciones para sofisticar y mejorar los sistemas de producción a través de herramientas como la trazabilidad que permite la identificación individual de los animales con los registros de pesadas, con la identificación de los animales más o menos eficientes, para lograr que con estas tecnologías de insumos podamos por ejemplo utilizar los alimentos más caros en animales más eficientes. Mercados, tecnología disponible y una organización nacional que nos permitan las condiciones adecuadas para poder trabajar son los tres elementos que nos hacen optimistas por la ganadería.

¿Cree que el plan de uso y manejo de los suelos impactará positivamente en la ganadería?
En algunas zonas será necesario incorporar sorgo, que se adecua muy bien a nuestros sistemas. Lo que mostramos en la jornada de la Unidad de Producción Intensiva de Carne (UPIC) de este año es que hay que ajustar la forma de suministro del sorgo y hacer un procesamiento adecuado. En algunos sistemas el quebrado del sorgo, si se llega a un molido fino permitiría mejorar la eficiencia de conversión.

Por la digestibilidad.
Exactamente. A través de esa mejora se podría mejorar la digestibilidad y por lo tanto la conversión. Lo importante es tener mercados ganaderos que permitan terminar ese tipo de productos, que precisan al sorgo. Hay demanda de sorgo y el agricultor se ve motivado a plantar más. No es un tema de plantar sorgo y después ver a quién se lo vendo, sino todo lo contrario. Hay que generar mercados, negocios, que precisemos novillos que tengan que comer ese sorgo.

¿Y cómo ve la mayor utilización de pasturas y verdeos?
Excelente. El sistema Índice Carga Cero (Icace) sirve para aquellos escenarios donde la pastura disponible para el invierno es solamente campo natural. El campo natural en invierno tiene muy poco aporte de nutrientes. En el caso de que por rotación o por tipo de sistemas de producción haya verdeos, pasturas, raigrás, festuca, praderas, trébol blanco, en ese tipo de escenario el manejo de las pasturas pasa a ser lo mejor, porque es un tipo de nutriente mejor que el campo natural. Para la ganadería son buenas noticias.

Pero no tiene la conversión del encierro a corral.
Es verdad, pero ahí nos retrotraemos a los datos de la UPIC de los años 2004, 2005 y 2006. Quien nos sigue desde esa época recuerda que trabajamos mucho con suplementación sobre pasturas. Mi tesis de doctorado, de la cual fue profesor orientador Juan Carlos Elizalde (argentino), era sobre el efecto de la suplementación con sorgo en verdeos de invierno y sobre praderas. Trabajamos extensamente en esa área y pensamos que para mejorar la utilización del forraje hay que tratar de suplementar. Esa suplementación permite cosechar eficientemente el forraje. El hecho de que no haya mucho pasto no quiere decir que no tengamos que utilizarlo eficientemente. Pero en general el plan de uso y manejo de los suelos trae buenas noticias para la ganadería.

¿Cómo ve los corrales de engorde en Uruguay?
La cuenta se ha ido ajustando. Hay que mejorar la conversión del alimento para que sea económicamente rentable. Los corrales de engorde, para seguir creciendo, tienen que chequear todo los puntos que afectan la conversión del alimento: la elección del tipo de animal, las características del corral, la rutina, la gestión, el gerenciamiento y las características de la dieta –que es el factor fundamental–. En las características de la dieta entra el procesamiento del grano y el sorgo bien molido asegura una conversión mejor. Hay otros procesamientos, por ejemplo la utilización de lo que llamamos steam flake, una tecnología que se desarrolló en Estados Unidos y que se está comenzando a desarrollar a nivel regional en parte de Brasil, Argentina y Uruguay. No es una tecnología para todos los productores. Lo que es para la mayoría –o todos– es un buen procesamiento del sorgo a través de una buena molienda. Hoy para que la cuenta de los corrales cierre tendrían que estar trabajando con una conversión de siete a uno. Sin embargo, la mayoría de los corrales está trabajando con conversiones de nueve o 10 a uno.

¿Están trabajando a pérdida?
No se puede decir que están trabajando a pérdida porque cada caso es particular. Capaz que si se compra un novillito barato y se agarra un pico de precios aun con una conversión de nueve a uno el negocio puede cerrar. Pero en términos generales, con un escenario de precios en relación flaco/gordo (precio del novillo flaco, precio del novillo gordo) superior a uno y con un sorgo a US$ 220 por tonelada, para que la cuenta cierre la conversión tiene que estar en términos de valores de siete a uno.

¿Cómo puede afectar a la ganadería el nacimiento récord de terneros en esta primavera?
Si nacen más terneros, para este verano habrá una mayor cantidad de vacas con ternero al pie. Si la proporción de vacas con terneros al pie es mayor que la proporción de vacas expuestas a toros, y la superficie de pastoreo es la misma, es probable que haya una proporción de vacas que su condición corporal será óptima, pero para mantener ese porcentaje de preñez desde nuestra óptica la aplicación del destete precoz pasa a ser una herramienta clave. Tendremos una primavera y un verano donde será más importante que nunca hacer un seguimiento corporal de los vientres aplicando una técnica de control de amamantamiento adecuado.

¿Y cómo afectará esa mayor oferta al precio del ternero?
No lo sé.