"Los costos políticos son míos, no del partido"

¿Qué pasó en la Intendencia de Salto que no hay plata para pagarle a los funcionarios?
Eso fue lo que se anunció en la transición con respecto a los temas de mayo y son múltiples los factores. Se están haciendo todas las gestiones posibles para poder juntarse con los recursos.

¿Cómo puede ser que la intendencia viva tan al día, dependiendo de peso a peso? ¿Qué falló?
No hay un solo factor. Nuestra intención es no interceder en las negociaciones que se están haciendo con el intendente. Estamos trabajando en algo donde también están involucrados actores del gobierno nacional, ediles y Adeom (los funcionarios municipales). Lo que se planteó en la transición es el problema para intentar llegar a una solución. Las soluciones pueden ser dificultosas, pero hay.

¿Cuáles son?
Ya se planteó en una primera instancia, y se está evaluando ahora, la categorización de la intendencia que en un momento asumió compromisos de fideicomisos para diferentes obras, para comprar ómnibus, que anduvieron cerca de los 800 millones de pesos, y hoy quedan unos 30 millones. Se puede plantear contar con las autorizaciones correspondientes para pasar el período teniendo en cuenta que esta intendencia se va, que perdió y asumirá otra. Hay que intentar buscar soluciones en conjunto a corto, mediano y largo plazo para encontrar mecanismos que permitan salir de esto.

¿Le había pasado esto antes, cuando estuvo al frente de la intendencia?
La lucha fueron los 59 meses. A veces está previsto una cosa y hay que reprogramar. No sólo la intendencia de Salto, también hay empresas que están debiendo y proponen reprogramaciones. Se puede recurrir a diferentes escenarios, pero en otros plazos, para poder hacer tareas. Es una lucha en una intendencia que hace obras, que mejoró los aportes a los funcionarios y que mejoró en diferentes áreas.

Hoy se está negociando crear un fideicomiso y se necesita determinada cantidad de votos de ediles, 21, para tomar decisiones que afectarán al próximo gobierno.

Hoy están negociando diferentes actores y se están viendo diferentes figuras. La del fideicomiso puede ser una, o buscar otros escenarios que es lo que se está negociando y nosotros no queremos interceder.

¿El gobierno nacional le debe plata a la intendencia de Salto?.
El gobierno nacional está involucrado en el tema. Manejó diferentes escenarios. Hay temas de empresas puntuales.

El director de la OPP, Alvaro García, afirmó que se está al día con las intendencias.
Vamos a conversar primero. Me parece más importante la solución y tratar de colaborar desde allí. La receptividad que se tiene y el apoyo de la OPP son importantes.

Desde Montevideo se ve ahora como que hubo una mala gestión en la intendencia de Salto.
Errores se cometieron, claramente. Lo dije en toda la campaña electoral. También hay que decir con exactitud la categorización A, las obras y las mejoras que se lograron en un departamento que tuvo un escenario político de paridad. Está a la vista que se hicieron muchas cosas.

¿Qué errores cometió usted?
Es un tema de diferentes factores. Varios gobiernos departamentales y empresas han tenido líneas de crédito para pasar el período. Al quedar un mes para irse, no permitió generar una instancia de esa característica. Se cumplió con la categorización, se cumplió con casi todos los requisitos. Hoy se necesita una solución política para generar plazos que se fueron acortando.

¿Cuánto es el presupuesto de la Intendencia de Salto?
Son unos 1.400 millones de pesos por año.

El intendente electo, Andrés Lima, afirmó que la deuda de la comuna es de 1.000 millones de pesos.
La información que manejan los contadores es que la deuda es por 600 millones de pesos.

¿Políticamente piensa que esto va a afectar negativamente al Partido Colorado, que ya venía mal?
En todo caso los costos políticos son míos, no del Partido.

Pero usted es una figura del partido, fue candidato a vicepresidente.
Si hay que asumir responsabilidades y costos es un tema de los que estamos buscando la salida. Tengo que colaborar en todo lo que pueda para ayudar al nuevo intendente y ayudar a Salto. No es la hora de medir costos políticos.