Hasta 400 proyectos de productores ganaderos familiares, priorizando el apoyo a propuestas grupales, serán asistidos desde este año con financiamiento que les permitirá resolver las dificultades que deben afrontar por la creciente variabilidad climática en Uruguay. Se sumarán más en 2014.
El Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) abrió ayer el plazo para que se presenten proyectos, elaborados y expuestos por técnicos privados registrados y habilitados ante la Dirección General de Desarrollo Rural (DGDR) del MGAP. Deberán tener un plazo de ejecución de hasta dos años y la financiación, no reembolsable, alcanzará a 80% de las actividades contempladas en el proyecto, con un máximo de US$ 8.000 por productor.
José Olascuaga, director de la DGDR, destacó que la financiación es posible por una donación del Fondo de Adaptación al Cambio Climático (FACC), “una innovación importante, en el país y a nivel mundial”.
Resaltó luego el valor social y económico en el país de la ganadería familiar, que ha debido afrontar diversas dificultades por el cambio climático, sobre todo sequías, ante lo cual hasta ahora principalmente hubo emprendimientos para “reparar heridas”; no obstante, con el denominado Proyecto Ganaderos Familiares y Cambio Climático se ejercerá una suerte de “medicina preventiva”.
Walter Oyhancabal y Eduardo Maldini explicaron cómo se implementará un proyecto dirigido a ganaderos familiares y asalariados rurales tenedores de ganado que agrupados o en forma individual estén en dos zonas que son las más vulnerables a la variabilidad y cambio climático: la Cuesta Basáltica y las Sierras del Este.
El proyecto permitirá elevar la eficiencia de cosecha y uso del agua; protección y restauración de la biodiversidad del campo natural; implementación de bancos de forraje y granos para la suplementación estratégica y campos de recría; prestación de sombra y abrigo en base a la forestación y promoción de sistemas silvopastoriles; y mejora de la gestión sostenible de los recursos naturales con adecuada gestión económica financiera del establecimiento.
El ministro Tabaré Aguerre destacó que este proyecto, que se activó en 2012 y se extenderá hasta 2017, es el segundo que se aprueba en Sudamérica y el cuarto en el mundo. Para su ejecución está prevista una inversión de US$ 9,7 millones. El 73% llegará en forma directa a los productores y unos US$ 800 mil llegarán directo a organizaciones de productores.
Aguerre resaltó que todo esto permitirá que los sistemas productivos de esos ganaderos familiares logren una condición de adaptabilidad mucho mayor.
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