Merkel se acerca a los migrantes y azuza la polémica en Europa

La canciller alemana Angela Merkel viajó al ojo de la tormenta y visitó un centro de acogida de refugiados en su país donde en los últimos días hubo protestas por parte de grupos neonazis en contra de los inmigrantes. Allí aseguró que habrá "tolerancia cero" contra los que ataquen a los solicitantes de asilo, que son cada vez más.

En plena crisis migratoria que azota a Europa, la alemana se desplazó hasta el albergue de Heidenau para conocer de primera mano cómo es la situación, ante la sobrecarga de estos centros por la llegada masiva de inmigrantes y el repunte de los incidentes xenófobos.

El fin de semana cientos de manifestantes convocados por el partido ultraderechista NPD protestaron frente al lugar adonde ayer fue Merkel. En la madrugada previa a su visita hubo una concentración para impedir por la fuerza el ingreso de ómnibus con peticionarios de asilo. Hubo enfrentamientos con la Policía, en los que grupos de neonazis arrojaron "piedras, botellas y petardos" a los agentes y dejaron más de 30 oficiales heridos, según informaron las fuerzas de seguridad.

El martes y miércoles hubo asimismo incidentes e intentos de incendios en otro centro.

Merkel, pues, llegó al lugar rodeada por un fuerte despliegue policial. Pero no se evitaron los abucheos y los gritos de "traidora" hacia la canciller, a la que una persona mayor le espetó que se preocupara primero de su "propia gente".

La canciller se mantuvo calma y pronunció un discurso en el que calificó de "vergonzoso" y "repulsivo" tener que vivir estos ataques xenófobos, que ya había calificado de "abyectos". "Hay que decirlo claramente: no habrá ninguna tolerancia para quienes cuestionan las dignidad de otras personas ni para aquellos que no están dispuestos a ayudar allí donde legal y humanamente está previsto que haya ayuda", dijo.

Se prevé que el gobierno alemán decida en setiembre al menos duplicar las ayudas extraordinarias a los municipios para que atiendan a los solicitantes de asilo, que ya en junio elevó de € 500 millones a € 1.000 millones.

Además, ayer anunció una ayuda urgente de € 1 millón para los refugiados que están cruzando los Balcanes occidentales y esta semana se comprometió a aceptar a todos los sirios que solicitasen asilo en su territorio, sin pedir su reparto proporcional entre países como se pretendió establecer en una cumbre del bloque.

Tensión diplomática

Al tiempo que pidió un "diálogo con los ciudadanos" para evitar las expresiones de odio y xenofobia, la alemana indicó que era preciso un profundo acuerdo entre los países de Europa, adonde han llegado unos 340 mil migrantes en los primeros siete meses del año. Según la agencia europea de las fronteras, Frontex, la cifra para igual período de 2014 fue de 123.500 ingresos.

Ahora se generó "una presión sin precedentes sobre las autoridades de control de las fronteras en Italia, en Grecia y en Hungría", según Frontex.

Las estadísticas de la Unión Europea revelan que Alemania es el país que más solicitudes de asilo recibe cada mes. Los últimos datos disponibles en Eurostat, correspondientes a junio de 2015, indican que hubo 35.445 pedidos. En segundo lugar figura Hungría (16.580) y luego Suecia, con 6.625, aunque seguramente en este lugar del podio se ubicaría Italia, para el que no hay datos tan recientes.

El pasado lunes la canciller se reunió con el mandatario galo, François Hollande, y ambos acordaron pedir a Italia y Grecia, dos de los principales países de entrada de migrantes al continente, que pongan en marcha "este año y sin dilaciones" centros de registro para los refugiados e inmigrantes.

Los italianos realizan estas tareas desde hace meses y reclaman más ayuda económica por parte de sus aliados europeos para hacer frente a una situación que los desborda. Por eso el ministro de Relaciones Exteriores italiano, Paolo Gentiloni, rechazó los comentarios del francés y la alemana.

Argumentó que Italia "cumple muy bien su deber, incluso hace más de lo que le toca, ya que salva a miles y miles de vidas humanas y además acoge a los refugiados". Insistió, una vez más, en la necesidad de que todos los países participen de igual forma en una realidad que impacta de modo más directo al suyo, de acuerdo con lo que transcribió Il Corriere della Sera.

Hoy en Viena habrá una cumbre sobre la situación de los migrantes en los Balcanes. Participarán varias autoridades del bloque, entre las que figura la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini. Asisten los primeros ministros de Albania, Macedonia, Kosovo, Montenegro, Serbia y Bosnia-Herzegovina y también los máximos responsables de Alemania, Francia, Italia, Croacia y Eslovenia. Esta instancia se considera previa a una conferencia sobre el problema migratorio que tendrá lugar en Budapest en octubre.

El próximo lunes la alemana se reunirá con el presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, y abordarán juntos el mismo asunto, entre otros temas que estarán sobre la mesa.