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Emergencia sanitaria y “cambio de acción” por coronavirus
Por Agustín Herrero y Natalia Gold
La jornada de Luis Lacalle Pou en su segundo jueves como presidente terminó después de las 22 horas. El mandatario se reunió con el ministro de Salud Pública, Daniel Salinas, y decidió que había que activar medidas para prevenir el ingreso del coronavirus a Uruguay. Todavía no se habían confirmado los cuatro casos de los que este viernes informó el Ministerio de Salud Pública.
La primera medida que resolvió el mandatario fue suspender el Montevideo Rock, un festival organizado por la Intendencia de Montevideo que se iba a realizar este fin de semana. La comuna no tenía intenciones de hacerlo, pese a que algunos artistas estaban cancelando su participación por la pandemia, y la orden vino desde la Torre Ejecutiva. El que transmitió esa directiva al intendente Christian Di Candia fue Salinas, por ser la máxima autoridad sanitaria del país.
Lo mismo ocurrió con el fútbol y la decisión de jugar a puertas cerradas. Lacalle se comunicó con el presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), Ignacio Alonso, y con el secretario de Deportes, Sebastián Bauzá, y la orden fue clara: partidos sin público el fin de semana. Finalmente, la AUF resolvió suspender el fútbol luego de que aparecieran los primeros casos de personas contagiadas de coronavirus en el país.
La rapidez con la que quiso moverse Lacalle Pou, luego de varios días de conversaciones e inacción entre ministerios, lo llevó a convocar de urgencia al Sistema Nacional de Emergencia. De la reunión participaron todos los ministros y el Congreso de Intendentes. El encuentro estuvo pautado para las 17 horas de este viernes y culminó sobre las 21. Lacalle se retiró media hora sobre las 19 para reunirse con los presidentes de los partidos políticos, volvió al encuentro del Sinae y lideró una conferencia de prensa.
Mientras la junta del Sinae seguía reunida, los presidentes de los partidos le ganaron de mano a la comunicación oficial e hicieron algunos anuncios sobre las medidas a tomar. Casi media hora después, los ministros, el prosecretario de Presidencia, Rodrigo Ferrés, la presidenta del Congreso de Intendentes, Adriana Peña (Lavalleja) y Bauzá se pararon detrás de Lacalle, Salinas y el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, que encabezaron la conferencia de prensa.
Con cara de preocupación, Lacalle comenzó la conferencia con un mensaje de “acción”. “Estamos en una fase distinta que la que venía atravesando el país a partir de los cuatro casos confirmados, y por ende esa fase,amerita un cambio de actitud y de acción del gobierno. En ese sentido, hemos estado trabajando bajo recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, hemos estado analizando los procesos más exitosos de los países que vienen teniendo este virus desde hace varias semanas y en ese sentido hemos tomado algunas decisiones”, dijo antes de anunciar una serie de medidas, que se toman luego de que decenas de personas ingresaron de países con la epidemia ya instalada sin ser controlados ni monitoreados.
El gobierno, en la voz del presidente, se comprometió a mantener informada constantemente a la población sobre cómo se siga desarrollando la enfermedad en Uruguay. A su vez, analizarán la veracidad de un reclamo realizado por una mujer contagiada que aseguró al diario El País que cuando volvió de Europa quiso que le hicieran el test para saber si tenía coronavirus pero no obtuvo una respuesta. “El subsecretario de Salud (José Luis Satdjian) apenas tomó contacto, llamó a esa persona, le suministró un médico, pero si ese relato es cierto, veremos. Vamos a ver la veracidad de esos hechos y de serlo, vamos a tomar las medidas correspondientes que ustedes se van a enterar”, dijo el presidente.
Las medidas
La primera medida anunciada por Lacalle fue la declaración de “emergencia sanitaria”. Además, el gobierno dispuso el “cierre parcial de fronteras”, así como una “cuarentena obligatoria” para aquellos que provengan de “países declarados de riesgo o sintomáticos”. Si bien la lista “es dinámica” Salinas, enumeró una serie de países: China, Corea del Sur, Japón, Singapur, Irán, Italia, España, Francia y Alemania.
Las personas que hayan estado en “contacto directo” con los infectados, es decir, “a menos de un metro”, deberán permanecer en cuarentena por 14 días, afirmó, sin aclarar si tienen identificadas a esas personas o si se hará un seguimiento de que cumplan con la orden.
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A partir de este viernes, también está prohibido el descenso de pasajeros y tripulantes de cruceros. Todos los espectáculos públicos fueron suspendidos –incluido el fútbol– y no se controlará la asistencia en ningún nivel de enseñanza, sea pública o privada.
“No están dadas las condiciones para suspender las clases porque hay niños que comen en las escuelas. Si más adelante se entiende necesario se suspenderán las clases”, explicó el ministro de Educación y Cultura, Pablo Da Silveira.
Algunas autoridades del mundo universitario, por su parte, decidieron la suspensión de clases por una semana (del 14 al 21 de marzo). Tanto la Universidad de la República (Udelar) como las universidades privadas tomaron esta decisión.
