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Núcleo duro industrial cayó en 2014 y alertan por nuevo descenso para este año

La producción se contrajo 0,5% el año pasado y cortó una racha de cuatro años de expansión
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11 de febrero de 2015 a las 20:23

Aunque la puesta en marcha de la planta de Montes del Plata fue el principal motor que generó un crecimiento en el conjunto de la industria manufacturera, el núcleo duro industrial cerró el año pasado con la primera caída desde 2009. A pesar de no ser un deterioro importante, el descenso enciende luces de alerta en un año en el cual el desempeño fue magro en la mayoría de los sectores. Precisamente, para el presidente de la Cámara de Industrias (CIU), Washington Corallo, el próximo gobierno deberá “atender” el incremento de los costos internos de las empresas uruguayas para evitar un descenso de entre 2% y 3% de la actividad en 2015.

Por otro lado, en 2014, se profundizó la pérdida de horas de trabajo que se produjo durante el año anterior, tanto en el núcleo industrial como en la industria en general. En el promedio de los 12 meses del año pasado, la producción industrial creció 1,1% desacelerándose respecto al aumento que tuvo en los dos años anteriores. La suba se debió al crecimiento en la producción de las fábricas de celulosa, dado que con la apertura en julio de Montes del Plata, ese sector recobró dinamismo y creció 36,9% en el promedio anual. En el mismo período del año pasado este crecimiento fue de 8,4%.

Por su parte, el núcleo duro industrial –que deja la refinería de ANCAP, UPM, Montes del Plata y la planta de Pepsi que se encuentra en zona franca– se deterioró 0,5% en el período relevado, de acuerdo a los datos divulgados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y procesados por la Unidad de Análisis Económico de El Observador.

El núcleo duro industrial deja de lado los cuatro grandes actores del sector manufacturero, debido a que por su tamaño –en conjunto representan casi 25% de la actividad industrial– y su lógica particular –su evolución no acompaña necesariamente al resto del sector–, distorsionan el análisis del grueso de las empresas. Esta caída se dio tras un relativo estancamiento del núcleo industrial el año pasado, cuando creció apenas 0,3%. De hecho, es el primer declive de la producción manufacturera en cuatro años –en 2009 descendió 5,5%– en un contexto de crisis financiera internacional.

El deterioro se produjo en 10 de los 19 sectores que componen la industria. Prendas de vestir se despegó del resto con una caída de 27,7% promedio anual, su mayor desplome en al menos 12 años, seguido por los minerales no metálicos (-6%) y metales básicos (-5,6%). Por el contrario, el sector del papel y productos de papel, junto con el de la madera, fueron los que más crecieron en el año, 26,7% y 7,6%, respectivamente.

Mientras que el volumen físico producido del rubro alimentos y bebidas, uno de principales sectores de la industria, cayó 1,1% después de 10 años de aumento. La caída fue acompañada por un deterioro en las horas trabajadas, de 2,4% en la industria en su conjunto y de 2,7% en el núcleo duro industrial. La baja se dio en 13 de los 19 sectores, principalmente en el de prendas de vestir, con una reducción de 28,1%, seguido por la producción de textiles, con un deterioro de 13,1%.

Causas y perspectivas
En diálogo con El Observador, el titular de la CIU enumeró las grandes variables que impidieron que el núcleo duro de la industria mantuviera el dinamismo que mostró entre 2010 y 2013. El descenso en el precio de la materias primas que el país exporta, los problemas de la zona euro, una menor expansión de China, un Brasil que tuvo un magro desempeño económico el año pasado y las clásicas restricciones que continúa aplicando el gobierno argentino para el ingreso de productos importados –incluidos los uruguayos)–, impusieron un “freno” el crecimiento de la actividad, según Corallo.

Si bien para 2015, los empresarios industriales aspiran a por lo menos igualar los niveles de producción del año pasado, en los últimos meses surgieron algunas luces amarillas en materia de competitividad que pueden comprometer esta perspectiva. “Vimos con cierta sorpresa que factores que podían ayudar como la energía registraron variaciones que no estaban previstas o se podían mitigar”, cuestionó el titular de la CIU. El empresario hace referencia al aumento de 6,9% en las tarifas de UTE que rige desde mediados de enero, y la baja de 3% en los combustibles en promedio que instrumentó ANCAP.

El empresario comentó que en un “escenario pesimista” la actividad industrial podría contraerse entre 2% y 3% este año, si no se mejora la ecuación de costos de las empresas. “El objetivo es tratar de trabajar con el nuevo gobierno para que esto no suceda”, afirmó.
Agregó que el cierre de los balances de las empresas están mostrando resultados “menores a los esperados”. Explicó que esto repercute en los planes de inversión a futuro y compromisos bancarios que deben asumir los industriales. “Además, si las empresas ganan menos, también se aporta menos utilidad para el Estado”, recordó Corallo.

Por otro lado, según un análisis de la consultora PwC sobre el desempeño de la actividad industrial en 2014, si bien cada sector tiene dificultades distintas, la mayoría son problemas de competitividad, así como de escasez de recursos humanos capacitados en algunas áreas.
“La productividad, consideramos, está dentro de las principales preocupaciones y desafíos del sector para 2015, otro año que vemos complejo para la situación de varias industrias”, advierte PwC.

La CIU con Cosse
El Consejo de la Cámara de Industrias (CIU) recibió ayer formalmente por primera vez a la futura ministra de esa rama, Carolina Cosse. En el encuentro, los empresarios le adelantaron algunos de los temas que preocupan al sector como la competitividad.

Los precios de exportación descendieron 3,6%
Después del repunte obtenido en 2013, los precios de exportación de la economía en general tuvieron el año pasado la mayor caída desde 2002. El Índice de Precios de Exportación (IPE) en dólares de la economía, registró durante 2014 una caída de 3,6% respecto al año anterior, según la información difundida ayer por el Departamento de Estudios Económicos de la Cámara de Industrias (CIU). Esta baja fue la mayor desde 2002, cuando el declive fue de 5,9%. En 2013, los precios de venta al exterior aumentaron 6,6%. Mientras que los primeros cinco meses del año los precios cayeron 4,2%, hasta setiembre, se recuperaron 3,9%, aunque no lograron compensar la caída anterior y volvieron a deteriorarse en el último cuarto del año 3,2%. Por otro lado, los precios de exportación de la industria manufacturera se deterioraron 0,9% en 2014, tras el aumento de 6,4% del año anterior. Dentro del sector industrial, el precio de las colocaciones externas de textil, vestimenta y cuero cayó 2,7% interanual, mientras que los precios de alimentos y bebidas disminuyeron 0,6% en el mismo período.


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