La justicia revocó este sábado la prisión temporal de nueve personas detenidas esta semana en una nueva fase de la Lava Jato, nombre de la mayor operación contra la
corrupción en la historia de
Brasil, y que investiga en esta etapa al grupo Odebrecht.
El juez Sergio Moro, que concentra las investigaciones del caso Petrobras, dejó en libertad a las nueve personas ya que la prisión temporal decretada finalizaba este sábado, aunque les impidió dejar el país.
La Fiscalía brasileña señaló esta semana que la compañía contaba con un departamento "profesional" exclusivo para el pago de sobornos en Brasil, que usaba empleados de confianza y tenía un sistema electrónico propio.
Tras ser destapada la nueva fase de la Operación Lava Jato, el grupo Odebrecht informó que realizará una "colaboración definitiva" con la Justicia brasileña en el marco de las investigaciones por el caso Petrobras.
Odebrecht, un gigante con 168.000 empleados y que actúa en diferentes sectores pero principalmente en la construcción, es una de las cerca de veinte empresas acusadas de integrar la red de corrupción que operó en Petrobras.
Según han establecido las autoridades brasileñas, las grandes contratistas de Petrobras montaron un cartel para distribuirse los contratos de la petrolera y supervaloraron los negocios realizados con la estatal por al menos una década. Para garantizar los contratos distribuían sobornos entre varios de los directores de Petrobras y decenas de autoridades y políticos que amparaban las corruptelas.
El caso ya ha mandado a prisión a los directores de varias de las mayores constructoras de Brasil y ha salpicado a medio centenar de políticos de todos los partidos, principalmente oficialistas, entre los cuales los presidentes del Senado, Renán Calheiros, y de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha.
El último blanco de la operación es el expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, a quien la Fiscalía acusa de haber recibido favores de las empresas que se favorecieron de los desvíos en Petrobras.
Leña al fuego
Según informó El País de Madrid, el expresidente de la empresa, Marcelo Odebrecht, uno de los presos por este asunto, ha anunciado su intención de revelar detalles de una trama de pagos ilícitos en la empresa para llegar a un acuerdo con la justicia. La confesión de Odebrecht amenaza al Gobierno y a la oposición, ya que la compañía es una de las mayores contribuyentes a campañas electorales de este país.
La empresa, que opera en más de 30 países, ha donado grandes sumas de dinero tanto a políticos del Partido de los Trabajadores (PT) en el gobierno, incluyendo la campaña de la presidenta,
Dilma Rousseff, como a sus principales rivales: el senador Aécio Neves (PSDB). Brasil espera que Odebrecht hable.