Oposición busca sobreprecios en ANCAP

Transcurrido la mitad del tiempo que tiene para trabajar la comisión investigadora de ANCAP en el Senado –que finalizará en diciembre– la oposición se concentra en el tema precios y sospecha que hubo negocios donde se pagó más de lo que indica el mercado.

Con esa duda, revisan los números de las colaterales y miran sobre todo a ALUR cuya planta en Paysandú construyó Abengoa por US$ 82 millones (a los que hubo que agregar otras obras por US$ 65 millones).

Según los empresarios Gabriel Pérez Morgan y Alfredo Correa, que no participaron de la licitación, la propuesta de Abengoa debió costar la mitad.

Correa dijo ayer a El Observador que Abengoa construyó ahora una planta de etanol en Illinois (EEUU) por menos dinero y mejor performance.

Desde el Frente Amplio se argumentó que esos empresarios pretendieron participar cuando el proceso ya estaba avanzado, lo que era inaceptable. Además se les marcó que no tienen experiencia en ese tipo de trabajos.

Desde la oposición se insiste, también, con que en ANCAP fallan los controles y ponen de ejemplo el manejo de la publicidad y las donaciones que fueron de US$ 10,5 millones en dos años.

El caso que muestran como emblemático –y que llevarán a la Justicia– es el pago de publicidad a una radio comunitaria de Quebracho (Paysandú) que, según el senador José Carlos Cardoso, no transmitía al momento de concretar la pauta.

Para demostrar si hubo sobreprecios, un grupo de funcionarios y técnicos que apoyan a los senadores Alvaro Delgado y Cardoso (Partido Nacional), revisan las boletas que pagó ANCAP, no sólo en Uruguay sino también en eventos en los que participó en Paraguay y Rusia.

La organización siempre estuvo a cargo de la agencia de publicidad La Diez que subcontraba a otra compañía: Latin Design & Events.

Uno de los costos cuestionados fueron los US$ 360.000 gastados en la inauguración de la planta desulfurizadora de La Teja.

En ese caso se revisó incluso cuánto salió arrendar la carpa que alojó a los presidentes Cristina Fernández de Kirchner y José Mujica y 1.500 invitados.

En la investigadora quedó claro que ANCAP no siempre solicita varios presupuestos para comparar y confía en lo que sugiera su agencia de publicidad La Diez.

Así lo señaló el miércoles Susana Pérez, jefa de comunicación corporativa de ANCAP, al ser consultada por el senador Pablo Mieres (Partido Independiente) en la comisión investigadora.

Según supo El Observador, el Parlamento pidió precios de carpas para sesionar en setiembre en la Meseta de Artigas (Paysandú), que no llegó a contratar. Medían 24 metros por 12 metros y fueron cotizadas a unos US$ 5.000 (carpa y piso).

La utilizada por ANCAP en la refinería era más grande y costó 10 veces más, según información en poder de los legisladores. Con ese nivel de detalle es que trabajan los investigadores blancos.

Delgado denunció en el Parlamento que ANCAP pagó casi el doble por su stand de la expo Prado en comparación a otros del Estado, de dimensiones similares. Este año, ANCAP no participó de esa exposición.

Pedro Bordaberry (Colorado) afirmó que en todos los negocios el ente pagó hasta cuatro veces lo presupuestado.

Transporte de cal

Con los transportistas, los blancos se informaron de los costos de llevar cal de Treinta y Tres a Brasil y aseguran que se paga hasta 30% más caro. La empresa que lleva la cal a Candiota – un recorrido de 300 kilómetros– recibe US$ 85 por tonelada. Delgado informó ayer a El Observador que esa empresa utiliza personal brasileño, camiones brasileños y fue contratada por Cementos del Plata (colateral de ANCAP) sin que hubiera llamado a precios.

Desde ANCAP se aclaró que esa transportista está "registrada" en Uruguay y su contratación no fue a pedido de la brasileña Compañía de Generación Térmica de Energía Eléctrica (CGTEE filial de Eletrobras) que es la que compra la cal a ANCAP.

El director Gómez señaló que en Uruguay no hay empresas con camiones tolvas para la cal.

La sesión del miércoles tuvo pasajes tensos entre el senador Delgado y el director Juan Gómez por la forma en que se eligió a la constructora del segundo horno en Treinta y Tres, que en un principio había ofertado US$ 9 millones por encima de otra propuesta.

El gerente de Portland, Juan Romero, aclaró que al final del proceso Cementos del Plata se vio beneficiada con un precio más bajo que el inicial.

En ese negocio, ANCAP no sólo da pérdidas sino que ya pagó US$ 7 millones en multas por no cumplir con la calidad y cantidad acordada y este año pagó multas de US$ 150 mil por mes.

Las autoridades del ente estiman que el año próximo las cuentas llegarán a un punto de equilibrio de acuerdo a lo informado en el Parlamento.

La oposición asegura que el aporte de los privados será clave para avanzar. Uno de los empresarios que será invitado es Matías Campiani, exsocio de Pluna con su grupo Leadgate.

El senador Marcos Otheguy no tuvo inconvenientes con esa convocatoria pero preguntó si realmente Campiani, que fue procesado con prisión, "es creíble" para el Partido Nacional.

Para el Frente Amplio, en ANCAP pudo haber "fallas administrativas" como lo dijo Otheguy, pero no irregularidades y menos delitos.

Mejor y más barata

La empresa Abengoa, que construyó la planta de etanol en Paysandú por US$ 82 millones, más US$ 65 en obras periféricas, construyó recientemente otra en EEUU por un costo menor, informaron a El Observador los empresarios Gabriel Pérez Morgan y Alfredo Correa.

La de EEUU se hizo por US$ 74 millones, llave en mano, es decir funcionando y produce cuatro veces más que la de Paysandú.