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Oposición venezolana dice que recibió ocho ataques en 12 días
El miercóles asesinaron a un dirigente; comicios son en dos semanas
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27 de noviembre de 2015 a las 05:00
La muerte de un líder opositor en un acto político tiñó de violencia la campaña por los comicios en Venezuela, donde los disidentes al gobierno de Nicolás Maduro aseguran que recibieron ocho ataques en 12 días. El seis de diciembre son las elecciones legislativas.
El joven identificado como Luis Manuel Díaz, secretario del partido Acción Democrática (AD) en Altagracia de Orituco, fue asesinado el miércoles de tarde "por disparo de arma de fuego", afirmó el secretario general de dicho partido opositor, Henry Ramos Allup, a través de Twitter.
El hecho ocurrió al finalizar un acto de campaña de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en el que participaron los candidatos de la alianza opositora y Lilian Tintori, esposa de Leopoldo López, dirigente opositor condenado a casi 14 años de prisión.
Ramos Allup aseguró que los disparos fueron hechos desde un vehículo "por bandas armadas" que, afirmó, forman parte del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), aunque aún no hay información de las autoridades al respecto.
La alianza opositora condenó la muerte del dirigente y aseguró que esta ocurre promovida "por un discurso oficial que anuncia, promueve y justifica la violencia".
"Desde el Comando Venezuela Unida queremos destacar que el Estado Venezolano es responsable, por acción y omisión, de cualquier acto de violencia en Venezuela", señaló un comunicado de la MUD.
La nota instó a la Organización de Estados Americanos (OEA), a las Naciones Unidas, a la Unión Europea y a la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) "a que exijan al gobierno nacional y al PSUV a rechazar públicamente el uso de la violencia como arma política".
Asimismo, pidió que se "garantice a los venezolanos el derecho a votar en paz y que se comprometan a aceptar pacíficamente la voluntad del pueblo", en las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre.
La Unasur, que mantiene una misión de observación de cara a las elecciones, se sumó a los cuestionamientos y rechazó de forma "enérgica" la muerte. El organismo pidió, además, "una exhaustiva investigación" de este hecho, "con la finalidad de evitar la impunidad frente a este suceso".
Pero en el gobierno no aceptaron sus denuncias. "Ahora la nueva moda es decir que grupos armados del chavismo atacaron a no sé quién. Esa nos la sabemos ya", criticó Diosdado Cabello, presidente del Parlamento.
El Programa Venezolano de Educación-Acción en Derechos Humanos (Provea, una ONG), sin embargo indicó que "urge detener hechos de violencia en actividades proselitistas convocadas por la oposición".
Para Provea "estas situaciones son motivo de alarma y preocupación", y recuerda las recomendaciones hechas por el Comité de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) respecto a que se debe garantizar la libertad de expresión y de reunión.
También desde Europa llegó una declaración de "interés y preocupación" por la situación que se vive en Venezuela, "agravada" tras la muerte del dirigente político. El Parlamento Europeo decidió enviar al país una delegación de observadores, después del informe preliminar que hicieron tres enviados.
"La situación postelectoral puede ser preocupante. La separación entre Gobierno y oposición es demasiado grande y muy probablemente Venezuela está a las puertas de una convivencia política que tiene que administrarse con inteligencia y generosidad", advirtió Ramón Jáuregui, uno de los eurolegisladores que participó de la misión de avanzada en ese país.
El joven identificado como Luis Manuel Díaz, secretario del partido Acción Democrática (AD) en Altagracia de Orituco, fue asesinado el miércoles de tarde "por disparo de arma de fuego", afirmó el secretario general de dicho partido opositor, Henry Ramos Allup, a través de Twitter.
El hecho ocurrió al finalizar un acto de campaña de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en el que participaron los candidatos de la alianza opositora y Lilian Tintori, esposa de Leopoldo López, dirigente opositor condenado a casi 14 años de prisión.
Ramos Allup aseguró que los disparos fueron hechos desde un vehículo "por bandas armadas" que, afirmó, forman parte del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), aunque aún no hay información de las autoridades al respecto.
La alianza opositora condenó la muerte del dirigente y aseguró que esta ocurre promovida "por un discurso oficial que anuncia, promueve y justifica la violencia".
"Desde el Comando Venezuela Unida queremos destacar que el Estado Venezolano es responsable, por acción y omisión, de cualquier acto de violencia en Venezuela", señaló un comunicado de la MUD.
La nota instó a la Organización de Estados Americanos (OEA), a las Naciones Unidas, a la Unión Europea y a la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) "a que exijan al gobierno nacional y al PSUV a rechazar públicamente el uso de la violencia como arma política".
Asimismo, pidió que se "garantice a los venezolanos el derecho a votar en paz y que se comprometan a aceptar pacíficamente la voluntad del pueblo", en las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre.
La Unasur, que mantiene una misión de observación de cara a las elecciones, se sumó a los cuestionamientos y rechazó de forma "enérgica" la muerte. El organismo pidió, además, "una exhaustiva investigación" de este hecho, "con la finalidad de evitar la impunidad frente a este suceso".
Uno de siete
Pero el caso de esta semana no es aislado, pues los opositores denuncian ocho y "aumentando". El excandidato presidencial Henrique Capriles, el candidato Miguel Pizarro y Tintori aseguraron haber sido víctimas de ataques por supuestos oficialistas. En al menos seis de los ocho ataques hubo armas de fuego.Pero en el gobierno no aceptaron sus denuncias. "Ahora la nueva moda es decir que grupos armados del chavismo atacaron a no sé quién. Esa nos la sabemos ya", criticó Diosdado Cabello, presidente del Parlamento.
El Programa Venezolano de Educación-Acción en Derechos Humanos (Provea, una ONG), sin embargo indicó que "urge detener hechos de violencia en actividades proselitistas convocadas por la oposición".
Para Provea "estas situaciones son motivo de alarma y preocupación", y recuerda las recomendaciones hechas por el Comité de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) respecto a que se debe garantizar la libertad de expresión y de reunión.
También desde Europa llegó una declaración de "interés y preocupación" por la situación que se vive en Venezuela, "agravada" tras la muerte del dirigente político. El Parlamento Europeo decidió enviar al país una delegación de observadores, después del informe preliminar que hicieron tres enviados.
"La situación postelectoral puede ser preocupante. La separación entre Gobierno y oposición es demasiado grande y muy probablemente Venezuela está a las puertas de una convivencia política que tiene que administrarse con inteligencia y generosidad", advirtió Ramón Jáuregui, uno de los eurolegisladores que participó de la misión de avanzada en ese país.
