Estilo de vida > MONTEVIDEO

Otra nueva vida para el bar El hacha

Es de las pocas estructuras edilicias que sobreviven desde el siglo XVIII en la zona de la Aduana; vuelve como restaurante
Tiempo de lectura: -'
03 de junio de 2013 a las 18:41

El Hacha es una costumbre de la Aduana, en Maciel y Buenos Aires. Se abrió como pulpería a fines del siglo XVIII; fue bar y almacén y después restaurante. Hubo intentos muy serios de convertirlo en una movida cultural y gastronómica de una Ciudad Vieja rejuvenecida. El último de esos intentos claudicó hace un año y medio atrás. Ahora Lucía Berretta, Ismael Nan y Gabriela Pérez lo intentan otra vez, con una impronta muy particular.

Para empezar, diez de las mesas fueron “intervenidas” por artistas nacionales. Dani Umpi, Yudi Yudoko, Santiago Tavella, Mauricio Pizard, Cecilia Vignolo, Pacha Albertini, Elián Stolarski, Fabián Mendoza, Diego Focaccio y el Colectivo Corbo.
Según Lucía Berretta, la idea era “integrar el arte a la gastronomía” y la intervención de las mesas es una síntesis de ese afán.

Mauricio Pizard usa una fotografía de la mesa de la princesa Laetitia D´Arenberg, en la que se aprecia la fineza de la vajilla, las manos de la princesa y un cenicero abarrotado, como una guiñada y también como una seña de identidad.

Cecilia Vignolo optó por una especie de “tejido” sutil y una serie de frases de una positividad visceral, en inglés y en español: “Thanks for being here”, “Me siento bien así de cerca”, “Here we are so close”, “Dejar disfraces”. La artista también tuvo la delicadeza de instalar ganchos debajo de la mesa, para colgar abrigos o carteras.

Cada una de las propuestas artísticas es totalmente personal, lo que le da una condición muy interesante al boliche: para conocerlo bien hay que ir por lo menos diez veces.

La decoración también incluye un carruaje en una de las paredes y una galería de arte, que en este momento exhibe obras de Pacha Albertini. También hay una biblioteca y un tocadiscos con bandeja para vinilos, para escuchar algún tango o un jazz con auriculares. En el patio de atrás se luce un aljibe dieciochesco, antes de pasar al baño de caballeros.

Tradición

Si se acepta una continuidad, El Hacha es sin duda alguna el boliche más antiguo de Montevideo. La historia y la leyenda se entrecruzan. Se entiende que existe con el nombre El Hacha desde el 15 de abril de 1794. Toma su nombre de un hecho de
sangre perpetrado en sus instalaciones con la herramienta en cuestión.

Es a mediados del siglo XIX que deja de ser pulpería para convertirse en almacén de ramos generales. Durante todo el siglo XX es almacén y bar, hasta su cierre temporal en el año 2000.

Es el único de los boliches legendarios de la Ciudad Vieja que queda en pie. Durante el siglo XX El Hacha fue punto de encuentro de personalidades del carnaval, el fútbol, el boxeo y el periodismo.

Gastronomía oriental

Ahora sus nuevos dueños llegaron con todos los bríos para darle una impronta ideal para los turistas, con espectáculos de jazz y de tango además delos vinilos y la biblioteca, y con una propuesta gastronómica muy especial: la cocina oriental del Uruguay y también la del lejano Oriente.

Eso es cortesía de uno de los socios, el chef Ismael Nan, quien trabajó durante 22 años en el mar, embarcado en naves mercantes de banderas muy diferentes: “Trabajé con personal filipino, indonesio y argentino. Creo que ya es tiempo de probar lo mío en tierra, en mi tierra”, dice Nan.

El restaurante abre los mediodías y noches de lunes a viernes y propone la cocina de olla tradicional uruguaya, como la buseca y los potajes, y también platos que Nan considera “olvidados” como el pollo a la Marenga y las compotas de frutas.
También figuran en el menú especialidades orientales, como la brochette de pollo, el satay, las salsas dulces de soja y especias como la canela, el coriandro y el cardamomo. Junto a las pastas caseras, entre las que hay sorrentinos de todo tipo. hay platos como el nasi goreng (un arroz con carne o camarones con especias).

A mediodía hay un menú ejecutivo, que ayer daba la opción de cazuela de lentejas o pastel de carne , una sopa crema de puerro de entrada y un postre que podía ser flan o crumble de manzana.

Nan anuncia que en temporada de cruceros el restaurante estará abierto de lunes a domingos almuerzo y cena.
En cuanto a los espectáculos y actividades culturales, la propuesta es variada y va en aumento. Este viernes habrá noche de jazz y bossa nova, con la actuación en vivo del Trío ABC Julio Faliú (percusión), Jorge Fonseca (guitarra) y Flavio Monzón (saxo).

El viernes pasado comenzaron las clases de tango, en uno de los salones despejado a los efectos. Serán los jueves y viernes de tarde.

La idea es conjugar el carácter de bien patrimonial de la ciudad, que tiene el lugar, con una actividad cultural constante y que sea referente del país, ya que los clientes serán en su mayoría turistas extranjeros.
El Hacha también participará del ciclo “Boliches en agosto”, en el cual se ofrecerán conciertos durante todo el mes en bares y restaurantes tradicionales de Montevideo.

La inciiativa forma parte de una avanzada cultural y gastronómica que toma de a poco a la Ciudad Vieja, incluyendo la otrora inexpugnable Aduana.

    Comentarios

    Registrate gratis y seguí navegando.

    ¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.

    Pasá de informarte a formar tu opinión.

    Suscribite desde US$ 345 / mes

    Elegí tu plan

    Estás por alcanzar el límite de notas.

    Suscribite ahora a

    Te quedan 3 notas gratuitas.

    Accedé ilimitado desde US$ 345 / mes

    Esta es tu última nota gratuita.

    Se parte de desde US$ 345 / mes

    Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

    Elegí tu plan y accedé sin límites.

    Ver planes

    Contenido exclusivo de

    Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.

    Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá

    Cargando...