Peleó con tiburón y fue heroicamente despedido de su trabajo

Fue otro caso de esos en que un video filmado por un aficionado se hace viral, va ganando exposición hasta que llegó a los jefes del centro de caridad en donde trabajan, que habían firmado su licencia por enfermedad por dos meses.

Paul Marshallsea y su esposa Wendy estaban sufriendo de mucho estrés y necesitaban licencia, informó el martes el diario inglés The Telegraph. Hicieron uso de la misma yéndose a Australia y al volver, se encontraron con una carta del empleador que decía “si bien ustedes declararon que no estaban en condiciones de trabajar, sí pudieron viajar a Australia y de acuerdo a lo que se vio en un video, hasta pudieron agarrar un tiburón”.

Ambos trabajaron en Pant & Dowlais Boys & Girls Club durante diez años y ahora, desempleados en una de las regiones con mayor índice de desempleo, enfrentan una situación difícil puesto que les restaba poco tiempo para retirarse.

El propio Marshallsea dijo que "uno piensa que al estar a cargo de un lugar de caridad para niños, podrían haberme dado las felicitaciones y una palmada en la espalda, pero que nos hayan despedido es bastante desagradable”.

Algunos meses atrás El Observador publicó una noticia similar, sobre una mujer que se tomó una foto en el cementerio de Arlington y terminó perdiendo el trabajo.

Y antes, se había dado el caso de la modelo Nana Gouvea, que se tomó unas fotos después del paso de Sandy por Nueva York y terminó siendo condenada internacionalmente.