En el último día de la semana los
precios del
petróleo se hundieron 6% para cerrar a cerca de US$ 30 por barril por primera vez en 12 años, tras nuevas caídas en los mercados bursátiles chinos y la perspectiva de un inminente incremento de las
exportaciones de crudo de Irán. Luego de finalizar en alza el jueves por primera vez en ocho sesiones, los futuros de los crudos Brent y estadounidense tocaron nuevos mínimos el viernes, acumulando en el año pérdidas de más del 20% y marcando el peor retroceso de dos semanas desde la crisis financiera del 2008.
El derrumbe de los precios no ha terminado, advirtieron algunos analistas, porque el levantamiento de las sanciones a Irán abre la puerta para que llegue más crudo a un mercado que ya está sobreabastecido.
A esto se suma, que las acciones en China, el segundo consumidor mundial de petróleo, volvieron a caer con fuerza el viernes y cerraron en mínimos desde diciembre del 2014, mientras que el yuan se debilitó en los mercados extranjeros.
Los futuros del crudo Brent para entrega en marzo bajaron US$ 1,9, o 6,3%, a US$ 28,9 por barril, tras tocar un piso a US$ 28,8 , un mínimo desde febrero del 2004.
Por su parte, el crudo referencial estadounidense WTI terminó la sesión con una caída de US$ 1,8, o 5,7%, a US$ 29,4 por barril, tras negociarse en el día a un mínimo de US$ 29,1, el menor nivel alcanzado desde noviembre del 2003. Pese a que los precios del petróleo se mantienen en torno a mínimos de más de 10 años, los analistas dicen que todavía no han tocado fondo y que la demanda probablemente disminuya en las próximas semanas, cuando las refinerías comiencen a cerrar para tareas de mantenimiento.
Los expertos internacionales ya están vaticinando un piso de US$ 20 a US$ 25 por barril para los próximos meses.
(Reuters)