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Poder de compra salarial aceleró su crecimiento en setiembre
El menor empuje inflacionario en el acumulado a setiembre llevó a que el poder de compra de los trabajadores uruguayos acelere su ritmo de aumento por cuarto mes consecutivo, explicado principalmente por el sector público. En tanto, el menor dinamismo de los salarios nominales generó que la capacidad de consumo de los privados tuvieran una muy leve desaceleración.
La capacidad de compra de los trabajadores aumentó 2% en el noveno mes del año en relación a igual período del año pasado, según los datos difundidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Este incremento llevó a que el salario real se acelerara por cuarto mes consecutivo alcanzando la mayor suba desde junio del año pasado.
El mayor dinamismo del salario real se explicó por el menor empuje inflacionario en el último mes, que pasó de un incremento de 9,4% en agosto a 8,9% en setiembre. En cambio, el salario nominal se desaceleró y aumentó 11,1% en los 12 meses a setiembre tras la suba previa de 11,4%.
Los trabajadores del sector público fueron los que se beneficiaron del mayor poder de compra como consecuencia de que el salario nominal aumentó al mismo ritmo que en el mes previo (11,8%). Así, el salario real público se incrementó 2,6%, el mayor incremento desde diciembre de 2014.
En tanto, en el bolsillo de los trabajadores del ámbito privado, el poder de compra se desaceleró muy levemente. Con una ralentización del salario nominal, que pasó de crecer 11,2% a 10,7%, la capacidad de consumo de este sector creció 1,6% tras la suba del mes anterior de 1,7% cortando con cinco meses consecutivos de expansión.
Si se desagrega por sector de actividad, el comercio y el sector de transporte y comunicaciones continuaron perdiendo capacidad de consumo. Mientras que el primero cayó 2% interanual tras la baja de 2,6% de agosto, el salario real del sector de transporte y comunicaciones pasó de un deterioro de 0,6% a 0,7% en igual periodo. En tanto, enseñanza y servicios sociales y de salud tuvieron un menor empuje y pasaron de un incremento de 5,4% a 4,6% en el primer caso y de 6,3% a 4,4% en el segundo.
El resto de los sectores que considera el INE dinamizaron su expansión del poder de compra. Hoteles y restaurantes aumentó 7,3%, construcción 3,6%, seguido por las actividades de intermediación financiera (2,4%) y actividades inmobiliarias (2,2%), mientras que el salario real de la industria aumentó 1,4%.
