El expreso de Guantánamo, Jihad Ahmad Diyab- que llegó a Uruguay en calidad de refugiado- fue el integrante más conflictivo del grupo de los seis que viajó Montevideo a fines de 2014.
En febrero de 2013 Diyab había empezado una huelga de hambre en la cárcel de Guantánamo, en reclamo por las condiciones de su reclusión y por la imposibilidad de ver a su esposa y sus cuatro hijos.
En 2009 la administración del presidente de Estados Unidos,
Barack Obama, consideró que Diyab estaba apto para salir en libertad. Estuvo más de diez años sin haber recibido una condena.
En Siria, Diyab cumplió con el servicio militar como conductor de ambulancias. Más adelante se estableció como vendedor de ropa y artículos del hogar, pero luego de casado la situación económica empeoró. En junio del año 2000 decidió mudarse con su esposa embarazada y sus hijos a Pakistán. Allí encontró un fuerte sentimiento anti árabe, por lo cual decidió marcharse a Kabul,
Afganistán, donde amigos sirios le ayudaron a instalarse. En ese lugar abrió un negocio de importación de comida, según consignó en 2014 en diario The Guardian.
Había sido detenido en 2001 por la policía pakistaní. Luego fue trasladado una prisión estadounidense en Afganistán y su destino siguiente fue la bahía de Guantánamo.
Poco días después de haber llegado a Uruguay, las condiciones de vivienda no le convencieron y enseguida reclamó que quería ser trasladado a una casa "
grande y amueblada", según informaron en ese momento allegados del exrecluso a El Observador. También fue el único que en principio
se negó a firmar un acuerdo con el gobierno de ayuda económica a cambio de cuidar su salud, aprender español y recibir capacitación laboral.
Recomendó a otros ex presos a que no viajen a Uruguay.
Entendía que era preferible quedarse en la cárcel que llegar a Montevideo, según publicó el diario argentino Clarín. Además reclamó que el gobierno realizara los contactos para que su familia viajara y se radicara con él. "Si no traen en los próximos días a mi familia y me dan la casa que prometieron, vuelvo a la embajada de Estados Unidos", dijo. Los refugiados ya habían protestado en ese lugar para reclamar la ayuda del gobierno.
Diyad afirmó que nunca perteneció a Al Qaeda, pero que después de haber pasado 13 años encarcelado, apoya el accionar del grupo terrorista.
Si bien el Departamento de Estado norteamericano señaló que Diyab fue capturado por ser sospechoso de pertenece a
Al Qaeda, el sirio lo negó. En entrevista con el semanario Búsqueda, el exprisionero aseguró que lo detuvieron por ser musulmán y vivir en Pakistán. "Que presenten la prueba de que pertenecía a Al Qaeda porque hasta ahora no presentaron nada", manifestó.
"Yo nunca tuve nada que ver con Al Qaeda, pero con el maltrato que recibí ahora me gusta Al Qaeda. Ellos crean sus enemigos, entonces yo estoy contento con lo que hace Al Qaeda ", agregó.
Diyab, de 43 años, afirmó que apoya la forma en que actúa el grupo fundado por Osama Bin Landen. "Es una reacción natural" porque "cuando el hombre musulmán es agredido, reacciona", expresó.
A su vez, señaló que el gobierno uruguayo y la Cruz Roja "están en falta" porque le prometieron traer a su familia y no lo hicieron.
De todos modos, Bonomi señaló que desconocía si el refugiado se fue de manera ilegal o si lo hizo con su documentación.