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Salida del TISA debilita "marca país" de Uruguay, según experto
El tratado acaparó atención de economistas en una discusión sobre desafíos para el quinquenio
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12 de septiembre de 2015 a las 05:00
La decisión adoptada por el presidente Tabaré Vázquez de abandonar las negociaciones para el TISA (acuerdo global sobre servicios) se llevó buena parte de la conferencia organizada el jueves por la Academia Nacional de Economía en la Universidad ORT, denominada "Uruguay: desafíos para el quinquenio 2015-2020".
El economista Gabriel Oddone de CPA Ferrere, el experto en comercio internacional Juan Labraga y el exsubsecretario y asesor de Cancillería Carlos Pérez del Castillo dieron su punto de vista sobre el camino que debe recorrer el país en materia de inserción internacional, y ninguno de los tres dejó de mencionar lo ocurrido esta semana, tras la negativa del Plenario del Frente Amplio –ratificada por el gobierno– a integrar las negociaciones por un tratado que libere el comercio de servicios.
Para Oddone es uno de los "errores más grandes" cometidos en los últimos tiempos, mientras que Labraga considera que Urugauy debilitó su "marca país" al alejarse de las negociaciones.
El economista argumentó que la decisión "es mala", primero porque la inserción externa "es crucial", y segundo porque considera que lo que hubo fue "una discusión superficial" y "no una discusión seria" sobre el tratado.
"Los uruguayos no hemos discutido el tema con suficiente profundidad como para haber tomado una decisión que era adherir o no al tratado, sino simplemente bajarnos de la negociación. Razones estrictamente tácticas que tienen que ver con el manejo de la coyuntura política nos han llevado a tomar una decisión errónea que va tener consecuencias en el mediano plazo", insistió.
Para Oddone, era importante participar en la negociación del TISA porque significa "estar en el mundo". A modo de ejemplo, dijo que los servicios son el 50% del Producto Interno Bruto (PIB) y el 26% de las exportaciones locales. "En comercio de servicios, Uruguay se parece más a los países que están negociando el TISA que a aquellos que permanecen fuera de él", afirmó.
Por otra parte, Labraga explicó que Uruguay tenía "poco para ganar" en términos económicos porque en el nexo de bienes, servicios e inversiones lo que importa son las redes de tratados que pueda tener un país, pero "no tan poco (que ganar) en términos de posicionamiento y marca país". "Con la noticia que tuvimos de Brasil (por la pérdida del grado inversor) uno estaría dando una señal de qué lado está", dijo.
Para el experto, Uruguay "no tenía absolutamente nada" para perder, en la medida que se negociara profesionalmente y se fijaran las reservas correspondientes. "El TISA era una señal, más allá de los resultados concretos, que iba a empezar a definir cómo y dónde se iba a posicionar Uruguay en el nuevo ordenamiento multilateral del comercio. Eso no está claro y ahora sigue sin estar claro", afirmó.
En otra parte de su presentación destacó que países que compiten con Uruguay cuando una empresa proveedora de servicios globales está decidiendo instalarse (Costa Rica, Perú y Colombia) están todos en el TISA. "Entonces si el TISA trae alguna ventaja la van a tener y si no la trae no. Por ahora no se bajaron", expresó.
En tanto, Pérez del Castillo explicó que una vez que los países que negocian en el TISA lleguen a un acuerdo –representan más del 70% del comercio mundial de servicios– van a tratar de "multilaterizarlo" en el marco de la Organización Mundial del Comercio (OMC) con el resto de las naciones.
"Ahí el problema es que nos traerían un acuerdo ya hecho y diciendo: 'Señores, firmen, porque esto lo vamos a multilaterizar y los que no se adhieran a este tipo de compromisos van a quedar afuera en condiciones de acceso'. Me parece que las etapas futuras para subirse van a ser cada vez más difíciles", señaló.
Los problemas de funcionamiento que tiene el Mercosur fue otro de los temas considerados. Para Oddone, "no tiene sentido" plantear que Uruguay abandone el bloque porque hay sectores muy dependientes del comercio con Argentina y Brasil. No obstante, indicó que el país "no está atado" y que debe diseñar su agenda de inserción internacional sin que esté "condicionada".
Por su parte, Pérez del Castillo resaltó que Uruguay "no puede darse el lujo" de ser "muy exigente y específico" con el tipo de inserción, y debe explorar "todas las posibilidades". Además del Tratado de Libre Comercio entre los países del Mercosur y la Unión Europea mencionó que se debe comenzar a pensar en integrarse al Tratado Transpacífico (TPP).
El economista Gabriel Oddone de CPA Ferrere, el experto en comercio internacional Juan Labraga y el exsubsecretario y asesor de Cancillería Carlos Pérez del Castillo dieron su punto de vista sobre el camino que debe recorrer el país en materia de inserción internacional, y ninguno de los tres dejó de mencionar lo ocurrido esta semana, tras la negativa del Plenario del Frente Amplio –ratificada por el gobierno– a integrar las negociaciones por un tratado que libere el comercio de servicios.
Para Oddone es uno de los "errores más grandes" cometidos en los últimos tiempos, mientras que Labraga considera que Urugauy debilitó su "marca país" al alejarse de las negociaciones.
"Error estratégico"
"La resolución del gobierno es uno de los errores más grandes que hemos cometido en muchos años. En todos los sentidos que uno lo mire, lo que resolvió el Ejecutivo constituye un error estratégico importantísimo", dijo el socio de CPA Ferrere.El economista argumentó que la decisión "es mala", primero porque la inserción externa "es crucial", y segundo porque considera que lo que hubo fue "una discusión superficial" y "no una discusión seria" sobre el tratado.
"Los uruguayos no hemos discutido el tema con suficiente profundidad como para haber tomado una decisión que era adherir o no al tratado, sino simplemente bajarnos de la negociación. Razones estrictamente tácticas que tienen que ver con el manejo de la coyuntura política nos han llevado a tomar una decisión errónea que va tener consecuencias en el mediano plazo", insistió.
Para Oddone, era importante participar en la negociación del TISA porque significa "estar en el mundo". A modo de ejemplo, dijo que los servicios son el 50% del Producto Interno Bruto (PIB) y el 26% de las exportaciones locales. "En comercio de servicios, Uruguay se parece más a los países que están negociando el TISA que a aquellos que permanecen fuera de él", afirmó.
Marca país y posicionamiento
Por otra parte, Labraga explicó que Uruguay tenía "poco para ganar" en términos económicos porque en el nexo de bienes, servicios e inversiones lo que importa son las redes de tratados que pueda tener un país, pero "no tan poco (que ganar) en términos de posicionamiento y marca país". "Con la noticia que tuvimos de Brasil (por la pérdida del grado inversor) uno estaría dando una señal de qué lado está", dijo.
Para el experto, Uruguay "no tenía absolutamente nada" para perder, en la medida que se negociara profesionalmente y se fijaran las reservas correspondientes. "El TISA era una señal, más allá de los resultados concretos, que iba a empezar a definir cómo y dónde se iba a posicionar Uruguay en el nuevo ordenamiento multilateral del comercio. Eso no está claro y ahora sigue sin estar claro", afirmó.
En otra parte de su presentación destacó que países que compiten con Uruguay cuando una empresa proveedora de servicios globales está decidiendo instalarse (Costa Rica, Perú y Colombia) están todos en el TISA. "Entonces si el TISA trae alguna ventaja la van a tener y si no la trae no. Por ahora no se bajaron", expresó.
Acuerdo "multilaterizado"
En tanto, Pérez del Castillo explicó que una vez que los países que negocian en el TISA lleguen a un acuerdo –representan más del 70% del comercio mundial de servicios– van a tratar de "multilaterizarlo" en el marco de la Organización Mundial del Comercio (OMC) con el resto de las naciones.
"Ahí el problema es que nos traerían un acuerdo ya hecho y diciendo: 'Señores, firmen, porque esto lo vamos a multilaterizar y los que no se adhieran a este tipo de compromisos van a quedar afuera en condiciones de acceso'. Me parece que las etapas futuras para subirse van a ser cada vez más difíciles", señaló.
Los problemas de funcionamiento que tiene el Mercosur fue otro de los temas considerados. Para Oddone, "no tiene sentido" plantear que Uruguay abandone el bloque porque hay sectores muy dependientes del comercio con Argentina y Brasil. No obstante, indicó que el país "no está atado" y que debe diseñar su agenda de inserción internacional sin que esté "condicionada".
Por su parte, Pérez del Castillo resaltó que Uruguay "no puede darse el lujo" de ser "muy exigente y específico" con el tipo de inserción, y debe explorar "todas las posibilidades". Además del Tratado de Libre Comercio entre los países del Mercosur y la Unión Europea mencionó que se debe comenzar a pensar en integrarse al Tratado Transpacífico (TPP).
